El comportamiento de Zayra Gutiérrez sigue dando mucho de qué hablar. Después de protagonizar numerosas polémicas por su asistencia a fiestas ilegales en plena pandemia del Covid – incumpliendo las medidas de distanciamiento, el toque de queda y el uso de mascarilla entre otras cosas – la hija de Arantxa de Benito y Guti ha vuelto a ser pillada saltándose todas las restricciones en un multitudinario evento en el que se la vio de lo más relajada.
Además, según ha publicado en sus propias redes sociales, Zayra habría asegurado que le da mucha pereza el toque de queda y que se iba de fiesta donde, por cierto, se dejó ver una vez más sin mascarilla y rodeada de gente a poca distancia.
Un comportamiento más que cuestionable que «Sálvame» ha decidido poner en conocimiento de la policía para que sean las autoridades quienes tomen medidas ante los reiterados incumplimientos de las medidas restrictivas impuestas por la pandemia.
Ajena a la polémica, Zayra disfrutada mientras en el programa hablaban de ella, de una divertida tarde en un conocido local de cachimbas a las afueras de la capital. Aparentemente muy tranquila, la hija de Guti se ha mostrado impasible ante la denuncia de su comportamiento a la policía y, sin atisbo de nervios, ha evitado defenderse o justificar su ajetreada vida social.
Por toda respuesta, Zayra ha respondido a todas las preguntas con un «lo que tengo que decir ya lo he hablado», un «no tengo nada más que hablar» o un «de verdad que no tengo nada que decir. He hablado de todo ya».