Docentes de la Cañada Real Galiana (Madrid) han alertado a la Consejería de Educación y Juventud de la Comunidad de Madrid del incremento de absentismo escolar derivado de problemas de salud de los menores y de sus familiares, tanto emocionales como físicos, derivados de los más de cuatro meses que llevan los sectores V y VI del enclave chabolista con corte en el suministro eléctrico.
En una carta entregada este lunes en la Consejería, los profesores han puesto también el foco en que las «meteorológicas adversas» registradas en la región, como la borrasca ‘Filomena’, han causado «daños en las infraestructuras» de algunas viviendas, ya de por si afectadas por la ausencia de luz.
«Tenemos miedo por la seguridad y salud de los niños por os problemas de habitabilidad de sus hogares», añaden y cifran en «al menos 40 casos» las personas que se habrían intoxicado por monóxido de carbono, a lo que se sumarían dificultades para el seguimiento de tratamientos médicos por la ausencia de luz.
Una situación ante la que han solicitado que se «provea a los alumnos de los derechos básicos del menor» y garantizar, entre otros, la oportunidad de mejorar su situación personal y económica, que actualmente se ha visto abocada al «efecto de exclusión social y marginalidad», en campos como la incapacidad de estos niños de comunicarse por redes sociales o «hasta sentirse rechazados o avergonzados por el conocimiento de los otros de su propia situación».
Además, este corte implica que en la situación pandémica actual tras el paso de ‘Filomena’, «no han tenido los medios adecuados para tener acceso a las clases telemáticas».
Al hilo, han cargado contra la gestión de las autoridades, que, a sus ojos, han convertido el problema en «una pelota que va y viene» entre administraciones. «Echamos de menos el seguimiento de los 250 millones de euros en virtud de los fondos Feder que el Gobierno regional asignó para lograr la inclusión social y el combate de la pobreza», plantean en la misiva.
Por último, han reprochado que la administración no esté cumpliendo los Objetivos de Desarrollo Sostenible que forman parte la Agenda 2030 y hacen caso omiso a instituciones como el Defensor del Pueblo, la ONU, Cáritas y «numerosas organizaciones y colectivos sociales, tanto laicos como religiosos».
«La consecuencia, en definitiva, es hacer todavía más vulnerable a una población en riesgo total de exclusión social por la que día a día luchamos para mejorar», concluye la misiva apoyada por los siguientes centros: IES Villablanca, IES Valdebernardo, CEIP Pedro Duque, IES Joaquin Rodrigo, IES María Rodrigo, CEIP María de Villota, IES Villa de Vallecas, CEIP Las cigüeñas, CEIP Dulce Chacón, CEIP Mario Benedetti, CEM Hipatia, CEIP Victoria Kent, CEIP El Olivar, IES Duque de Rivas, CEIP Juan Gris, CEIP Loyola De Palacio, CEIP Ciudad Valencia, CEIP Doctor Severo Ochoa; y el CEIP Quijote.