Ana Soria y Enrique Ponce siguen siendo el centro de la información social. Ya sea por unas tórridas escenas de besos o en esta ocasión por un suceso algo desafortunado. Y es que han detenido a la pareja del torero. Así lo anunciaban a bombo y platillo en la tarde del sábado 6 de febrero en el programa de Telecinco Viva la Vida. Tras la detención, Ana Soria fue llevada a la comisaría de Policía. Y todo delante de su novio. Pero parece ser que no ha sido tan recientemente como parecía.
De hecho, ocurrió durante la semana pasada. Pero la pareja ha intentando mantenerlo en la intimidad hasta que se ha filtrado la noticia. Está claro que Enrique Ponce es un fuera de la ley. Acabando con su matrimonio de años con Paloma Cuevas para irse con una jovencita estudiante y viviendo una segunda juventud en plena pitopausia. Lo que no sabíamos es que Ana Soria, que es estudiante de Derecho, se saltaría las leyes tan a la ligera. Esperemos que si acaba sacándose la carrera y no termina por dedicarse en cuerpo y alma al modelaje, no tenga esa misma moralidad.
2Una reaparición preocupante
No solo se les ha visto en el Instagram de Ana Soria dándose arrumacos amorosos. También han sido fotografiados juntos en la calle. Y es que una revista se encargó de publicar unas fotos que nos dejaron algo preocupados.
Si bien es verdad que se ha evaporado el rumor de que ya no estaban juntos, si que nos dejó preocupado ver el rostro de la pareja. Tanto Enrique como Ana estaban muy serios. De hecho, parecía que Enrique quería consolar a su pareja con el brazo sobre el hombro.
Lo que también aparecía en la foto era el nuevo miembro de la relación. Un perrito que iba en brazos de Ana Soria. Quizás iban al veterinario a poner la última vacuna de la rabia a la mascota o quizás es que tienen esa cara cuando se levantan por la mañana.
