Cómo hacer un arroz a la cubana perfecto

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Una receta muy conocida por todos es el arroz a la cubana y es que seguramente lo habéis comido muchas veces. El secreto de su éxito está en la combinación dulce-salado y en que los alimentos que lo integran son de agrado de una gran mayoría. Este tipo de plato consiste en una combinación de arroz blanco, huevos fritos y plátano frito, así de fácil. En España suele acompañarse de tomate frito, para darle todavía más chispa si cabe.

Antes de seguir, hay que puntualizar que es este no es un plato típico cubano, si no plenamente español. Hay fuentes que sitúan su origen en las Islas Canarias, de ahí el plátano, pero tampoco podemos asegurarlo. Cualquier cubano que visita nuestro país se sorprende al ver el nombre de este plato, ya que ellos no lo identifican como propio. Sí son alimentos que consumen en la isla, juntos o separadamente.

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Preparación del arroz a la cubana

Plátano

Comenzamos por preparar el arroz blanco. En una cazuela, vertemos un par de cucharadas de aceite de oliva virgen extra. Cuando coja temperatura, echamos el arroz, mezclamos y lo sofreímos. Añadimos ahora 2 partes y media de agua, por cada una de arroz. En cuanto comience a hervir, salamos al gusto y bajamos a fuego bajo. Cocinamos 16 minutos. Echad un vistazo de vez en cuando para que no se quede sin líquido y se pegue al fondo. Probamos el arroz y rectificamos de sal si es el caso. Lo dejamos reposar, tapado, unos 2/3 minutos y listo para comer.

Cuando le falten unos 5 minutos al arroz, nos ponemos con el resto del plato. Pelamos los plátanos y los cortamos en dos mitades, a lo largo. En una sartén, añadimos la mantequilla, y dejamos que se derrita. Doramos los plátanos por ambos lados y reservamos, tapados. En la misma sartén, vaciamos la mantequilla y añadimos una lámina de aceite de oliva virgen extra. Cuando coja temperatura, freímos lo huevos, con sal al gusto. Y ya tenemos el plato listo. Para cada comensal, servimos un poco de arroz blanco, 2 huevos fritos y las 2 mitades de plátano.

Solo falta un pan rico para acompañar y rechupetear bien en la yema de huevo. Una opción muy española es rociar el arroz con una generosa cantidad salsa de tomate frito. Así le damos si cabe más gracia al tema. Esto le suele encantar sobre todo a los más peques de la casa. La de veces que se habrá comido este plato en tiempos mozos, y también en la época universitaria. Hay que reconocer que es irresistible y que está de rechupete.