La palabra tsunami proviene del japonés y significa ola en puerto u ola escondida. Estas olas suelen viajar a una velocidad de aproximadamente 800 km/h (500 mph) en aguas profundas.
Un tsunami pueden viaja de un lado a otro en un día el Pacífico o el Atlántico. A medida que las olas se acercan a la costa, disminuyen su velocidad y la distancia entre ellas, lo cual ocasiona que aumenten su altura.
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El tsunami no tiene la forma de las típicas olas como las que se aprecia en la costa. Más bien son una serie de subidas y bajadas del nivel del mar con gran extensión (sobre 1,000 km-620 millas).
Las crecidas de las olas pueden pasar de 5 minutos hasta 1 hora, puesto que la distancia entre la cresta de una ola y la próxima pueden ser sobre 400 millas.
Se dice además que la fuerza, peso y volumen de agua que trae un tsunami es grande y el cuerpo básicamente se desparrama sobre la costa.
En cuanto a los riesgos, se dice que por lo general es para las zonas ubicadas hasta los 30 metros (90 pies) de altura sobre el nivel del mar y a menos de 3 km (2 millas) de distancia de la costa.
Causas de un tsunami
Un tsunami puede ser producido por deslizamientos de tierra subterráneos o erupciones volcánicas. Pero la gran mayoría ocurren por terremotos de gran magnitud bajo la superficie acuática con hipocentro en el punto de profundidad.
Este produce un movimiento abrupto en sentido vertical del fondo marino, ocasionando que el agua del océano sea impulsada fuera de su equilibrio normal y cuando intenta recuperar su equilibrio genera olas.
Las olas del tsunami viajan a lo largo del océano a unos 805 km por hora y, en alto mar son prácticamente imperceptibles. Sin embargo, cuando se aproximan a la tierra, comienzan a crecer en altura y energía, destruyendo todo lo que está a su alrededor.
Una gran señal de que se aproxima un tsunami es cuando el mar se retira. Posteriormente llega la ola principal y puede pasar 5 a 10 minutos, como también pueden pasar horas para que llegue a tierra.
Otra señal son las mareas bajas y altas o hasta que el mar se retira por completo.
También un sonido extraño. Cuando este se acerca puede producir un sonido anormal del océano, como si fuera un crujido o rugido.
Los tsunami suelen ocasionar:
- Destrucciones de ciudades enteras.
- Inundaciones de extensos territorios costeros.
- Destrucción de lecho marino.
- La vegetación de tierras bajas pueden resultar destruidas en considerable medida, como los manglares y hierbas.
- Pueden ocasionar la extinción de ciertos animales escasos, como las tortugas marinas.
Clasificación
Los tsunamis se pueden clasificar por la distancia de su origen y tiempo de llegada o arribo en tres categorías:
- Tsunami local. Es aquel cuya fuente de origen es cercana y puede afectar las zonas costeras en pocos minutos o menos de una hora.
- Tsunami Regional. Aquel que es capaz de ocasionar destrucción en una región geográfica particular, mayormente dentro de los 1,000 kilómetros (621 millas) de Puerto Rico y de afectar las zonas costeras de 1-3 horas luego de formarse.
- Teletsunami o distante. Procedente de una fuente lejana , más de 3 horas de tiempo de viaje desde el lugar donde se origina.
Zonas vulnerables a un tsunami
Cualquier océano puede experimentar un tsunami, pero es más frecuente que ocurran en el Océano Pacífico. Es precisamente aquí donde son más comunes los terremotos de magnitudes considerables , en especial las costas de Chile, Perú y Japón.
También es preciso tener en cuenta el tipo de falla que ocurre entre las placas de Nazca y Sudamericana , llamada de subducción. Esto se refiere a la placa cuando se va deslizando bajo la otra y hacen más propicia la deformidad del fondo marino, por lo que se genera los tsunamis.
De hecho, es precisamente por estas razones que los tsunamis considerados más devastadores ha ocurrido en el Océano Pacífico, pero también se han registrado casos en el Atlántico e incluso en el Mediterráneo.
¿Qué hacer en caso de emergencia?
Si vive en la costa, averigüe a cuanto sobre el nivel del mar y a qué distancia de la costa se encuentra su casa.Las necesidades de evacuación pueden basarse en estos parámetros.
Un terremoto, un fuerte ruido subterráneo, o una rápida subida o bajada de la marea son síntomas de que puede aproximarse un maremoto.
Todos en la familia deben saber cómo actuar, cómo cortar el suministro de gas, luz y agua, y los números de emergencia a los que pueden llamar de ser necesario.
Establezca un punto de reunión, por si la familia se encuentra dispersa. Tenga a mano su kit de emergencia.
Si escucha información de que puede haber un tsunami o detecta señales en tal sentido, evacue el área de inmediato. Suba a un lugar alto.
Aléjese de la playa. Bajo ninguna circunstancia permanezca en el lugar, si puede ver la ola, estará demasiado cerca como para escapar de ella.
