Fue un mito de la televisión y todavía su nombre sigue resonando con fuerza. Pepa Flores vive alejada de las cámaras, los focos y los escenarios que la vieron crecer cuando todavía no sabía a lo que se dedicaba. Una tormentosa vida que, lejos de la sonrisa que lucía en cámara, acabó por devorar al personaje que tenía y consiguiendo que el único deseo fuera estar fuera de la farándula.
Hoy, Pepa Flores cumple 73 años. El año pasado pensamos que volveríamos a ver a aquella mujer que dio tanto por la cultura de España recogiendo el Goya de Honor, pero lo cierto es que en su lugar, vimos a sus tres hijas que, orgullosas y emocionadas, subieron al escenario para homenajear a su madre. Respetando la decisión firme que tomo Pepa a mediados de los 80, sus hijas dejaron claro que ahora tenía la vida que siempre había soñado.
Y es que tras toda su carrera profesional como actriz y cantante, Pepa Flores llegó a confesar públicamente que durante su mejor época había sufrido acoso. Ya saben, los camerinos antiguamente no eran como son ahora y aunque nunca se llegó a desvelar un nombre, siempre se ha sabido públicamente que la vida de la artista fue un infierno.
Todo el mundo veía a una niña talentosa y, con el paso de los años, a una mujer que estaba hecha para estar frente a la cámara en cualquier película, pero la realidad que vivió Pepa Flores estaba muy lejos de lo que todo el mundo soñaba. Consiguió lo más alto, pero también sufrió lo que nunca nadie se ha llegado a imaginar, es por eso por lo que nunca más ha vuelto a aparecer en la gran pantalla.