La película El exorcista tiene un concepto argumentativo que pocos conocen. Y es que, más allá de la cinta que nos presentó William Friedkin para el año 1973, existe una historia bastante particular en la que fue inspirada este filme de terror. A pesar de los años, se mantiene como uno los largometrajes más representativos de este género en el séptimo arte.
De hecho, al día de hoy, esta pieza cinematográfica sigue estando en el gusto de la gente, que quedó atrapada para siempre; su impacto ha ido pasando de generación en generación. Todo este escenario historiográfico vino de la mano del ya fallecido escritor y director de cine estadounidense William Peter Blatty, autor de la novela publicada en 1971. A la postre resultó ser el guionista de la película que se ganó el Óscar al mejor guión adaptado dos años más tarde.
3La obsesión por contar una historia llena de catolicismo con El exorcista
William Peter Blatty sabía que podía lograr muchísimo con esta historia, pero hay que recordar que en ese entonces apenas se encontraba realizando sus estudios universitarios. No obstante, con el paso del tiempo, se fue obsesionando con esa historia. Ya convertido en un importante amante de las letras, se le vino nuevamente a su idea el hecho de revivir esta historia que sin duda, no conoció límites, pues estuvo dándole la vuelta al mundo.
Cabe destacar que tenía vastos conocimientos en religión, por lo que se le metió en la cabeza formarse para ser un verdadero experto en los exorcismos. A tal punto, que leyó una gran cantidad de libros sobre posesiones demoníacas que habían sido publicados en idioma inglés desde 1940. De hecho, antes de escribir El exorcista, estuvo en contacto con sacerdotes, iglesias, aunque sabía que era complejo la reconstrucción de los hechos.