Todos sabemos que el ejercicio físico es vital, y en el caso de que quieras, vamos a ver los abdominales que debes hacer al día para tener un vientre plano. Dejando de lado los beneficios para la salud que tiene el hecho de hacer ejercicio físico cada semana, no vamos a descubrir nada nuevo si decimos que el ejercicio nos ayuda a desarrollar un cuerpo con los músculos definidos. Si combinamos este ejercicio con una dieta variada y equilibrada podremos conseguir cualquier objetivo que nos planteemos, y además mejoraremos el funcionamiento de nuestro organismo y nuestra salud.
Esos no son únicamente los beneficios que nos aporta el ejercicio físico, sino que además nos ayuda a prevenir un gran número de enfermedades entre las que se encuentran la diabetes o la hipertensión, pero además mejora la salud de nuestro corazón, de nuestro sistema respiratorio y de la resistencia que podemos desarrollar mejor ni hablamos. Los beneficios físicos tampoco son los únicos, sino que también tiene beneficios para nuestro estado de ánimo.
Vamos a ver cuántos abdominales tenemos que hacer para conseguir un vientre plano:
2La dieta es tan importante como el ejercicio
Como comentábamos anteriormente, la dieta es tan importante o más que la actividad física para conseguir un cuerpo y un vientre tonificado. Según destaca Juan Ruiz López, entrenador personal, en una dieta es esencial «un adecuado equilibrio entre los tres macronutrientes: proteínas, hidratos de carbono y grasas». Por otro lado, el experto también habla de las cantidades de comida y los diferentes tipos de dieta que existen, y dice que como es lógico, todo difiere de una persona a otra y del tipo de cuerpo y organismo de cada uno. Por lo tanto, el mismo ejercicio puede venirle muy bien a una persona y otra no.
Realizar ejercicios específicos para un grupo muscular concreto, en este caso el abdomen, no hace que se pierda grasa por arte de magia, sino que debemos trabajar el llamado «déficit calórico«. Esto es básicamente ingerir menos calorías de las que gastamos.
Aunque duela, para tener un deficit calórico hay que dejar de lado todo tipo de comida procesada y los conocidos ultraprocesados. Las frutas, verduras, legumbres, proteínas de calidad, frutos secos y grasas buenas son clave en este objetivo. En resumidas cuentas, debemos comer lo más natural posible.