Caminar no es algo que todas las personas hagan a la misma velocidad. Sin embargo, un estudio acaba de determinar que la velocidad a la que caminamos sirve como un biomarcador de la salud neurológica y fisiológica de las personas, especialmente de quienes están en la cuarentena. Caminar lento por tanto puede ser un indicativo de tener problemas de salud. Te contamos por qué.
6Caminar lento puede utilizarse como indicador de problemas de salud
Lo que está claro es que parece que la velocidad a la hora de caminar debe tenerse en cuenta como un indicador que resulta muy útil para determinar si las personas de mediana edad tienen problemas de salud. De hecho, ya existían previamente investigaciones que determinaban que se pueden identificar diferentes tipos de demencias en incluso el glaucoma a través de la velocidad a la que caminan las personas.
En el año 2013, se llevó a cabo una investigación que tomó como base a 93 personas de más de 70 años. Llegando a la conclusión de que las personas que caminaban más lento tenían hasta 9 veces más de probabilidades de desarrollar un deterioro cognitivo leve. En este caso, lo que se hizo fue medir la velocidad a la que estas personas caminaban por su casa utilizando durante tres años sensores de infrarrojos y a la vez se le realizaron regularmente desde memoria y ejercicios mentales.