Caminar no es algo que todas las personas hagan a la misma velocidad. Sin embargo, un estudio acaba de determinar que la velocidad a la que caminamos sirve como un biomarcador de la salud neurológica y fisiológica de las personas, especialmente de quienes están en la cuarentena. Caminar lento por tanto puede ser un indicativo de tener problemas de salud. Te contamos por qué.
4Las pruebas neurocognitivas realizadas a los niños pueden determinar su velocidad a la hora de caminar como adultos
Según el estudio, las personas que caminan a una velocidad media de 2 metros por segundo mantienen un estado de forma mejor y tienen mejores resultados quieres que lo hacen a una media de 1,3 metros por segundo. Además, las personas que caminan más lento, al llegar a los 45 años presentan cambios estructurales en el cerebro.
Los investigadores mantienen que existe una relación directa entre las pruebas neurocognitivas que se realizó a las personas cuando tenían 3 años y su velocidad al caminar a los 45. De modo que el coeficiente intelectual, la comprensión del lenguaje, la tolerancia a la frustración, el control emocional y las habilidades motoras que se evaluaron los niños están relacionadas con el tipo de caminante que sería después de los 40.