El BOC publica las resoluciones del cierre de Laredo, Colindres, Polanco y Santa María Cayón

El Boletín Oficial de Cantabria (BOC) ha publicado esta tarde, en una edición extraordinaria, las resoluciones del Gobierno regional por las que, desde esta medianoche, se establece el anunciado confinamiento perimetral de los municipios de Laredo, Colindres, Polanco y Santa María de Cayón así como el cierre de su hostelería, comercios minoristas y academias o la suspensión de determinadas actividades por su alta incidencia de casos de coronavirus.

Además, se limita el número de personas en los espacios públicos a cuatro o en los domicilios, donde solo podrán reunirse los convivientes.

Estas restricciones, que entran en vigor a las 00.00 horas de este jueves, 28 de enero, son por un periodo de 14 días –aunque podrán prorrogarse o dejarse sin efecto en función de la evolución epidemiológica de estos municipios– se han articulado, por una parte, a través de un decreto del presidente de Cantabria, Miguel Ángel Revilla, y, por otro, en una resolución de la Consejería de Sanidad.

En el decreto del presidente de Cantabria se establece la restricción de la entrada y salida de personas a estos cuatro municipios salvo en el caso de desplazamientos justificados, la limitación a cuatro del número máximo de personas en espacios públicos tanto abiertos como cerrados (está en seis en el resto de la comunidad), la limitación de reuniones exclusivamente entre convivientes en espacios privados o domicilios, y el máximo de diez personas en lugares de culto.

A éstas se suman las aplicadas por resolución del consejero de Sanidad, que marca que deberán permanecer cerradas al público las zonas interiores y exteriores de los establecimientos de hostelería y restauración, excepto para servicio de entrega a domicilio o recogida –con excepción de comedores laborales y escolares–.

También deberán cerrar establecimientos minoristas excepto de primera necesidad (alimentación, bebidas, farmacias, veterinarias, ópticas, prensa, combustible, etcétera). En el caso del servicio de peluquería, solo se permite a domicilio.

Además, se suspenden todas las actividades en centros deportivos, culturales y de ocio y las actividades deportivas colectivas, así como la formación presencial que imparten entidades para la formación de empleados públicos, academias, autoescuelas y entidades de formación profesional para el empleo.

En estas resoluciones se justifican las medidas adoptadas aludiendo a un informe de la Dirección General de Salud Pública de este miércoles, en el que se indica que, en la semana del 18 al 24 de enero, los indicadores de la situación epidemiológica, particularmente los referidos a la incidencia acumulada, se mantienen en niveles «extremos» y los indicadores sanitarios, como la ocupación hospitalaria y de UCI, están en una estadio «alto» o «extremo.

Además, se indica que el análisis realizado de su evolución durante las dos últimas semanas muestra que los indicadores epidemiológicos (incidencia acumulada o incidencia acumulada en mayores de 65 años) actualmente se encuentran «al alza».

El objetivo de las medidas es disminuir el impacto de los factores de riesgo de la transmisión disminuyendo la probabilidad de exposición a los mismos, evitando la generación de situaciones donde pueda concurrir y minimizando el riesgo cuando estos ocurran.

Se busca restringir la generación de casos secundarios y cadenas de transmisión fuera del entorno inmediato, es decir, en el ámbito social y domiciliario, y fuera del lugar de residencia de los casos así como disminuir los espacios y oportunidades donde la adherencia a las medidas de prevención es menor debido a la «relajación» de los espacios y momentos de ocio y la posibilidad de ejecutar medidas de control (identificación de contactos) es menor.

También se quiere reducir el número de personas expuestas a casos en el ámbito social, domiciliario y desconocido; y el de contactos estrechos por cada caso confirmado fuera de su entorno inmediato (grupo burbuja); los brotes y el número de casos asociados con vínculo epidemiológico en el ámbito social y domiciliario.

Además, se busca restringir la generación de casos secundarios y cadenas de transmisión en el ámbito social y laboral a partir de casos asintomáticos no diagnosticados.