Con la llegada de las bajas temperaturas y la necesidad de calentar las viviendas, es muy probable que hayas escuchado hablar de ellas, pero ¿sabes cómo funciona una caldera de gas? Con este artículo, vamos a ayudarte a saber qué caldera de gas elegir y cómo sacarle el mayor partido.
Si bien es cierto que hay distintos tipos de calderas, el funcionamiento de todas ellas es prácticamente muy similar. Básicamente se trata de un depósito, normalmente metálico, que contiene agua que se calienta gracias a la combustión de gas. Este agua caliente sale del depósito y se utiliza o bien para calentar los radiadores únicamente o para calentar los radiadores y como agua caliente sanitaria. Sigue leyendo y tendrás todos los datos necesarios.
Tipos de caldera de gas
Son muchas los tipos de caldera de gas para agua y calefacción que existen en el mercado. Vamos a ver diferentes modelos de estas para poder elegir la que sería para nosotros la mejor caldera de gas.
La caldera de gas Vaillant EcoTEC plus VMW ES 236/3-5 GN, es una caldera de gas de condensación mixta. Este tipo de calderas pueden llegar a ahorrar hasta un 30% en la factura del gas ya que cuentan con un sistema que les permite recuperar el calor perdido, además al reducir el consumo de gas también reducimos la emisión de gases contaminantes. Las calderas que utilizan este sistema de condensación son las que más respetan el medio ambiente y las que cuentan con un mayor rendimiento. Sin ninguna duda la caldera de gas más eficiente es la caldera de condensación.
La caldera de gas Hermann Micraplus Condens 25 GN, también es una caldera de condensación que cuenta con NOx Clase 5, esta es la calificación más alta según el ranking de la UE por su baja emisión de NOx. Además esta caldera es compatible con un sistema solar de energía.
La caldera de gas Saunier Duval Isomax Condex 35 E GN es una caldera de condensación mixta. Lo que hace de esta caldera una buena elección es que cuenta con dos depósitos de 21 litros que garantizan un suministro continuado de agua caliente. Esta cualidad la hace muy práctica e interesante para aquellos hogares con varios miembros de familia donde se utilizan varios cuartos de baño a la vez. Además, para conocer más información sobre las calderas Saunier Duval, la marca pone a tu disposición en su web el manual de esta caldera de gas Saunier Duval y del resto de sus calderas.
Aspectos básicos de la caldera
Hay dos aspectos que resultan muy básicos pero que su desconocimiento hará que no saquemos el máximo provecho a nuestra caldera de gas. El primero de ellos es saber a que temperatura debo poner la caldera de gas. En principio la temperatura de la caldera debería estar entre 55ºC y 70ºC. Esto dependerá de que los radiadores sean suficientes en la vivienda, que estén bien purgados, de que utilicemos un termostato para regular la temperatura de la calefacción, del tiempo que empleemos en ventilar la vivienda y por supuesto de la temperatura a la que tengamos regulada la calefacción. Según el IDAE (Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía) esta temperatura no debería de exceder los 21ºC durante el día, y para dormir no debería superar los 17º.
En segundo lugar tendríamos que saber a que presión debe estar la caldera de gas. Esta es una de las causas más frecuentes de las averías de calderas de gas. Para que nuestra caldera funcione correctamente la presión debe de estar en torno a 1,2 bar pudiendo oscilar un 25% hacia arriba o hacia abajo. No obstante, ante cualquier síntoma de mal funcionamiento de nuestra caldera es recomendable ponerse en contacto con Servicio Técnico Oficial del fabricante de la caldera. Ahora solamente queda elegir tu modelo entre toda la variedad de calderas de gas para hacer de tu hogar un espacio confortable donde disfrutar del invierno.
Explosión de caldera de gas
Existen dos causas principales por las que una caldera de gas puede explotar. Una de ellas es la falla del control del fuego, dedicado a la apertura y cierre de las válvulas de combustible por las que el gas entra en el quemador.
Normalmente, cuando un dispositivo de falla de flama está activo, el piloto, la pequeña llama que podemos ver en algunas calderas, se enciende; al encender la caldera, el gas pasa al quemador y se enciende con esa flama. Sin embargo, si el piloto se extingue, la válvula se apaga y el gas no puede fluir, evitando que se acumule y combustione de manera espontánea. Un fallo en esta parte puede producir una aglomeración de gas que termine con una explosión. Otro posible fallo se encuentra en el prepostato, que se encarga de apagar el quemador automáticamente cuando la presión del quemador llega al límite. Si esa presión se excede, puede provocar una explosión, aunque existen varios controles que normalmente lo impiden.