El plató de Sálvame ha visto entrevistas de todo tipo: desde amables pasando por canallas y hasta llegar a incómodas. Los invitados del programa de Jorge Javier Vázquez pueden enfrentarse a cualquier situación cuando están sentados en el sillón de entrevistado y es que los colaboradores pueden tener un mal día y «atacarle con machete».
También puede ocurrir todo lo contrario y que el entrevistado vaya con el cable cruzado y no quiera hablar. Por este motivo, vamos a repasar las respuestas más cortantes que han desestabilizado las entrevistas de Sálvame.
4KIKO RIVERA PIDIÓ AYUDA Y SU MADRE SE LA NEGÓ
Uno de los momentos más recordados en los últimos meses ha sido la entrevista que concedió Kiko Rivera a Sálvame Deluxe. Esto desencadenó la guerra en la que se han visto envueltos madre e hijo. El DJ acudió al plató para defenderse de las acusaciones de infidelidad a su mujer, Irene Rosales. Sin embargo, Kiko Rivera se rompió y confesó que estaba padeciendo una depresión.
Su madre, Isabel Pantoja, no pudo contenerse y entró por teléfono para intentar animar a su hijo, aunque en realidad consiguió todo lo contrario. La tonadillera le echó en cara que estuviera así cuando hay gente que lo está pasando peor por la pandemia del Covid-19. Ella afirmó que iría a ver a su hijo, pero eso nunca sucedió. Semanas después, Kiko Rivera abrió la caja de los truenos y contó todo lo que había hecho su madre con la herencia de Paquirri.