Una duda común que surge cuando estamos reformando nuestra casa y queremos instalar estufas o radiadores es: ¿dónde colocarlos? Algunos dicen que debajo las ventanas y otros dicen que en las paredes interiores para que no se escape el calor por la fachada, pero realmente ¿qué es mejor? El sitio donde pongamos la fuente de calor influye en su eficiencia y la rapidez con la que nos climatice la casa.
1Algunos beneficios y ventajas de las estufas y radiadores
Antes de iniciar con los consejos sobre la ubicación de estufas y radiadores en el hogar, hay que entender las ventajas de equipar tu casa con dichos equipos, como calentar las manos frías en segundos.
En primer lugar, las estufas y radiadores son muy fáciles de usar y son una opción mucho más segura que chimeneas u otros sistemas que funcionen con muy altas temperaturas; además calientan rápidamente el espacio, lo que te garantiza que no tendrás que esperar mucho tiempo para obtener una temperatura de confort.
También es importante destacar que las estufas y radiadores funcionan muy bien cuando necesitas calentar espacios pequeños, como un pequeño estudio o una oficina que suponen una inversión menor que otros sistemas de calefacción.
Las estufas y radiadores se pueden quitar con facilidad y transportar a una nueva vivienda en caso de mudanza, mientras que otros sistemas como por ejemplo la calefacción centralizada o suelo radiante son sistemas fijos y no desmontables y lo más importante es la ventaja que te ofrecen al cooperar con mantener un consumo energético optimizado para ahorrar en tus facturas.