La Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Trans y Bisexuales (FELGTB) ha denunciado este martes que, pese a que en 2020 se celebró el 15º aniversario del matrimonio igualitario, las familias LGTBI «siguen teniendo menos derechos en España» que el resto de familias porque «el propio ordenamiento jurídico continúa discriminándolas».
Como ejemplo, el coordinador del grupo de Familias de la entidad, José María García, ha explicado que «las parejas de mujeres deben cumplir unos requisitos para registrar a sus menores que las de hombres y mujeres, no».
Así lo ha explicado durante su intervención en las X Jornadas de Familia LGTBI, organizadas por la Federación, en donde ha precisado que las familias de dos mujeres no pueden filiar a sus descendientes desde el hospital, salvo que estén casadas antes del nacimiento, de manera que la mujer no gestante está obligada a adoptar a su propio bebé.
García ha señalado que esta discriminación ha ocasionado «muchos problemas» a las parejas de mujeres que tenían previsto casarse a partir de marzo de 2020 para que se les reconociera la maternidad del bebé y que han tenido que aplazar la boda hasta después del nacimiento por el cierre o paralización de los registros como consecuencia de la pandemia.
«Una pareja mixta puede filiar a sus descendientes desde el hospital sin que al hombre se le exija ningún tipo de trámite, incluso si el bebé ha sido gestado mediante técnicas de reproducción asistida, cosa que no sucede si la pareja de la mujer que ha dado a luz es otra mujer», explica, antes de denunciar que se trata de «una discriminación flagrante» hacia estas mujeres.
RECLAMAN EDUCACIÓN AFECTIVO-SEXUAL
Estas desigualdades, ha apuntado el coordinador de Familias de la FELGTB, también dependen del lugar donde resida la pareja porque sigue sin haberse aprobado una ley estatal LGTBI que unifique los derechos del colectivo en todo el territorio español.
En este sentido, García denuncia que el hecho de que los menores reciban educación en diversidad afectivo-sexual, familiar y de género en las escuelas depende actualmente de la comunidad autónoma en la que las familias residan y, en muchos casos, incluso de la voluntad de cada centro y/o del profesorado.
«Esto origina que la infancia de las familias LGTBI carezca de referentes y que el peso de explicar su realidad familiar al resto del alumnado recaiga directamente o sobre los propios menores, o en la voluntad arbitraria del profesorado, lo que incrementa su riesgo a sufrir acoso escolar por LGTBIfobia», lamenta García.
En este sentido, alerta de que, a día de hoy las familias LGTB están excluidas del sistema educativo ya que no aparecen reflejadas en los libros de texto ni en los currículos educativos.
LEY DE DIVERSIDAD FAMILIAR
Para solucionar esta situación, desde la FELGTB han exigido al Gobierno y al resto de administraciones implicadas, la inclusión de la diversidad familiar en los temarios de oposiciones para docentes, ya que es una competencia estatal».
Por otra parte, la directora general de Diversidad Familiar y Servicios Sociales del Ministerio de Política Social y Agenda 2030, Patricia Bezunartea, ha destacado el compromiso del Ejecutivo con lasfamilias LGTBI para trabajar conjuntamente en la elaboración de la Ley de Diversidad Familiar, anunciada por el Ejecutivo en febrero de 2020.
«Es el momento de que se acaben las desigualdades legales y sociales entre las familias tradicionales y el resto de modelos familiares que han surgido en las últimas décadas u otras muchas familias que permanecían en una posición secundaria», ha explicado.
A su juicio, «esta ley es fundamental» porque «no hay un único modelo de familia y todos deben tener el mismo refrendo legal».