Todos nos quedamos sorprendidos con la repentina desaparición de Rubén Cortada en el medio artístico. El actor y modelo de origen cubano, había logrado puestos importantes en la televisión española, que desde un primer momento le abrió las puertas a ese talento que tiene. Incluso, fue Antena 3 donde lo vimos en Bandolera durante el año 2011 y 2012.
De ahí en adelante, su rostro ya no era desconocido, pues el chico de casi 1.90 metros de estatura, se fue mostrando con esa estampa de galán y seductor, que para las mujeres, era todo un lujo verlo. Lo cierto, es que, su lejanía de las pantallas tuvo que ver con motivos personales. Ahora te vamos a contar el profundo infierno que vivió en su país natal y por eso es que no lo veíamos.
5Las malas decisiones
Sea cual sea el escenario, Rubén Cortada ya tenía un nombre en España. El hecho de haberse perdido le pasó factura. El actor ha reconocido las malas decisiones que ha tomado últimamente, y que, a pesar de que todo en su mente está en orden, ha destacado que en ciertos momentos sus decisiones no fueron apuntando para bien.
A pesar de que no quiso entrar en grandes detalles, sí le dejó bien en claro a sus fanáticos que no eran unas vacaciones de relajación. Sino más bien todo lo contrario. Resultó ser un infierno del cual quería salir lo antes posible.
“Me fui muy abajo. Mal. Son procesos y todo el mundo los tiene. No es que yo sea especial por esto. Y estamos hablando de esto justamente porque ahora estoy bien. Pero nuestros demonios están todo el tiempo acechando, o por lo menos a mí me están dando todo el tiempo. En Cuba fue bajar al noveno círculo del infierno. Saludé a Dante: ‘¿hola qué tal?, ¿todo bien?'» (Cortada:2021).