El Real Madrid ha vuelto a entrar en una mecánica nada positiva para sus intereses de cara al final de temporada. Sus últimos resultados lo mantienen en la lucha arriba en la tabla; pero irremediablemente el Atlético de Madrid se aleja poco a poco a pesar de que en la clasificación aparece solo un punto por arriba. El problema esta en que esa puntuación es u espejismo debido a que los colchoneros tienen tres partidos menos que los merenges; aunque es cierto que primero deben ganar sus partidos, todo parece indicar que se pondrán muy por encima de los de Zinedine Zidane. Precisamente es en la figura del entrenador francés que Florentino Pérez ha encontrado algunos de sus problemas más graves, tanto así que incluso los ha considerado como una especie de «traición» a su confianza.
De puertas para afuera se esparce el mensaje de que con el entrenador galo todo va de maravilla, pero la realidad indica que todo no está tan bien como debería. Luego de la traición que supuso irse casi sin previo aviso tras la conquista de la tercera Champions League consecutiva, en el 2018, todo quedó resuelto unos meses después con su regreso como una especie de salvador. Sin embargo, tras pasar por esa temporada de transición y la consecución de dos títulos la campaña pasada (LaLiga y la Supercopa de España), Florentino Pérez pensó que en este curso las cosas buenas se afianzarían aún más; pero nada nada más alejado de la realidad. Todo ha empeorado y el francés pierde crédito con el pasar de los días por las decisiones que ha tomado.
4Unos números que hacen tambalear a Zidane
Esta campaña se supone que sería la de la confirmación del nuevo proyecto de Zidane, una suposición que venía de haber ganado de buena forma el título de Liga y además agregar la Supercopa de España cuando muy pocos creían que podría ganar algún trofeo el curso pasado. No obstante, nada de eso se ha visto; porque los números obtenidos por el equipo contrastan y mucho con lo que hicieron la campaña anterior, al punto de que hacen tener lo peor para un Zidane que comienza a tambalearse una vez más en su puesto.
Esas irregularidades del equipo comienzan a cansar tanto a la afición como a la parte alta del club. Florentino Pérez ve como en todos los frentes hay agujeros: en LaLiga están de segundos a puntos del Atlético, pero los rojiblancos tienen tres partidos menos; y en la Champions League avanzaron como primeros de grupos, pero sus tropiezos ante equipos menores hacen temer que el Atalanta pueda encontrar una forma de dar la sorpresa. Un buen ejemplo de que los números no lo acompañan es que en toda la temporada pasada perdieron tres partidos en el torneo español, pero en apenas 18 duelos ya llevan la misma cantidad de derrotas. Zidane deberá reparar muchas cosas si quiere que la confianza del presidente blanco vuelva a estar intacta y no piense en sus errores como como una «traición» a toda esa fe que le tiene.