Llega el día de Reyes y además de abrir los regalos que nos han dejado Sus Majestades de Oriente, existe una tradición que inunda los hogares españoles, el famoso roscón de Reyes. Rellenos de trufa, de crema, de chocolate, de cabello de ángel o sin relleno, existen tantas opciones como gustos a la hora de comer.Sin duda es uno de los productos más consumidos durante la temporada navideña pero, ¿sabes de dónde ha salido esta deliciosa tradición?…
Sus orígenes se remontan a las tortas que se consumían durante las fiestas Saturnales, unas celebraciones en torno al dios Saturno en la Antigua Roma con motivo de los solsticios. Cada una de esas tortas escondía un haba seca en su interior, y quien la encontraba se convertía en el ‘Rey de la fiesta’, un cargo de carácter burlesco que ‘gobernaba’ durante los días que durara la celebración.
Aunque la haba o judía parece haber estado presente desde los orígenes del roscón, la llamada ‘sorpresa’ no ha dejado de evolucionar a lo largo de los siglos. En la actualidad, el roscón puede esconder desde la propia haba, hasta dinero. Fue Felipe V quien importó desde Francia la modalidad de introducir una moneda como premio y que se ha mantenido hasta la actualidad.Sin duda alguna podemos confirmar que la dulce tradición está más que consolidada en nuestro país donde se consume una media de 1,6 roscones por hogar.