Ha sido el broche perfecto de fin de año. Los nostálgicos están de enhorabuena, porque durante un par de semanas, dos episodios, pudieron sentirse de nuevo en los años de su adolescencia. Física o Química, más conocido como FoQ, constituye todo un hito en la educación sentimental de quienes fueron adolescentes hace cosa de entre diez y quince años. FoQ se emitió entre el 4 de febrero de 2008 y finalizó, por cancelación, el 13 de junio de 2011. En total, fueron siete temporadas de altísima intensidad, que suponen 77 episodios de una intensísima trama.
Amoríos, dramas adolescentes y emociones juveniles eran los principales ingredientes de la serie y, por tanto, también del reencuentro. En esta segunda parte, este breve reencuentro de los protagonistas cambian un poco las tornas. Los personajes tienen diez años más y, se supone, son algo más maduros y sus sentimientos están un poco más asentados. Pero solo se supone, claro, porque en estas circunstancias las emociones y las pasiones silenciadas durante años y años se desbordan como si fuera un volcán. En general, se disfutó la vuelta de FoQ, pero no todo les encajó a sus fans. Esto es lo que menos gustó del reencuentro de la mítica serie.
3La polémica con el creador
No sabemos si fue un desliz o no, si hubo algún tipo de intención oculta o de mala baba en esto. Vamos a pensar bien, de entrada. El caso es que, en el primer episodio del reencuentro de FoQ, el que colapsó la página de Antena 3, no metió en los créditos el nombre de Carlos Montero, el creador de la serie. Y al afectado, naturalmente, le molestó mucho ese feo, y escribió lo siguiente en su cuenta de Twitter:
“Mola que algo que creé hace once años (FOQ) colapse la web de A3 (así será de buena…) con los dos nuevos capítulos. Lo que ya mola menos es que me hayan obviado hasta en los títulos de crédito (sin mí nada existiría) Pero allá ellos«. Al final, FoQ rectificó su error y en la segunda entrega de la serie se incluyó al final el nombre del creador original de la serie: Carlos Montero. «Basado en los personajes creados por Carlos Montero», dice el escueto mensaje.
