Las vacunas para protegernos del Covid-19 ya están aquí, se han hecho esperar mucho menos de lo que se pensaba y esto sorprende, por no decir, que hace despertar los recelos de una parte importante de la población. De todos los proyectos existentes la vacuna de Moderna y la de Pfizer-BioNTech han sido las primeras en empezar a aplicarse en diferentes países.
Las dos vacunas tienen muchos parecidos pero también algunas diferencias, por ejemplo, la vacuna de Moderna no requiere de congeladores especiales para su conservación, lo que la convierte en más fácil de aplicar en lugares de difícil acceso.
4La vacuna de Moderna se basa en el ARN mensajero
Tanto la vacuna de Moderna como la de Pfizer se basan en el ARN mensajero (ARNm). Debemos tener en cuenta que la eficacia que se anuncia para estas vacunas es bastante superior a las de las vacunas convencionales que conocemos hasta ahora, algo sorprendente. Al ser vacunas creadas con materiales genéticos se consigue acelerar mucho los procesos de fabricación. La contrapartida está en que este sistema nunca ha sido utilizado antes en humanos a gran escala.
Existen más de diez proyectos de vacunas que están en fase tres trabajando contrarreloj para crear vacunas efectivas contra el Covid-19, la mayoría han apostado por modelos más tradicionales, utilizando partes del virus atenuado o inactivo o fragmentos de proteínas del virus intentando conseguir que nuestro sistema inmune sea capaz de producir anticuerpos.
La estrategia de Pfizer y de Moderna es totalmente diferente, el ARNm (ácido Ribonucleico mensajero). Se trata de introducir en nuestro organismo instrucciones genéticas a través de moléculas ARN para dar orden a nuestras células de crear las proteínas para defendernos del virus. Se cree que para ello las compañía están empleando un sistema llamado transcripción in vitro una técnica novedosa pero que lleva años investigándose. De hecho, se ha mostrado que puede generar inmunidad frente a otras enfermedades como puede ser la gripe.