El mercado de fichajes de invierno ya llegó y los clubes suelen tomarse este espacio para resolver algunos inconvenientes que surgieron en sus plantillas en este inicio de campaña, pero para otros es el momento de hacer los deberes que no lograron cumplir en el verano. Los errores pasan y muchos los solucionan ahora, porque como raza el dicho «mejor tarde que nunca». Sin embargo, en estos tiempos en los que la crisis del coronavirus todavía asola a los equipos, la verdad es que no muchos podrán acudir al mercado para reforzarse y otros, como el Real Madrid, prefieren guardarse de cara al verano.
Los viejos tiempos en que los fichajes invernales se veían de un lado a otro parecen haber quedado atrás; aunque claro está, las sorpresas nunca están descartadas, porque los intercambios y las cesiones pueden dejar varios cambios interesantes. La cosa es que para las escuadras grandes estos fichajes no suelen verse muy bien, debido a que muchos lo ven como que no hicieron bien su trabajo en verano; además de que su oportunidad de hacer grandes desembolsos no es tan fácil, porque los clubes no están dispuestos a perder a sus cracks a mitad de temporada. En el caso del equipo merengue es aún más difícil por su estatus fichar en enero; pero aún así ha hecho algunas apuestas y lo cierto es que, con más ranas en su historial, el Madrid afrontará otro mercado de invierno con los ojos abiertos por si ficha, pues tratar de no fallar.
5Faubert fue el peor chiste en ivierno
Entre los fichajes invernales que más se recuerdan en el Real Madrid, pero no por razones positivas, obviamente aparece el de Julien Faubert. Si el de Marcelo fue un total éxito y el de Cassano un completo fiasco, el de Faubert casi ni se puede catalogar; porque en una escala de lo negativo, está tan bajo que no llega ni a eso. Después que el conjunto merengue perdió el fichaje de Antonio Valencia, extrañamente decidió apostar el francés para ocupar esa posición de extremo por la derecha que tanto necesitaba reforzarse; pero las cosas no pudieron salir peor.
Solo llegó a disputar 60 minutos en su cesión al Real Madrid y su paso fue tan gris que solo es recordado por su episodio de haberse quedado»dormido» en el banquillo en un duelo ante el Villarreal. La verdad Faubert es una de las formas de burlarse del equipo blanco, porque en el campo no hizo absolutamente nada y todavía muchos se preguntan cómo llegó allí; no obstante lo que si queda claro es que en ha sido el peor fichaje de la historia del Madrid.