El mercado de fichajes de invierno ya llegó y los clubes suelen tomarse este espacio para resolver algunos inconvenientes que surgieron en sus plantillas en este inicio de campaña, pero para otros es el momento de hacer los deberes que no lograron cumplir en el verano. Los errores pasan y muchos los solucionan ahora, porque como raza el dicho «mejor tarde que nunca». Sin embargo, en estos tiempos en los que la crisis del coronavirus todavía asola a los equipos, la verdad es que no muchos podrán acudir al mercado para reforzarse y otros, como el Real Madrid, prefieren guardarse de cara al verano.
Los viejos tiempos en que los fichajes invernales se veían de un lado a otro parecen haber quedado atrás; aunque claro está, las sorpresas nunca están descartadas, porque los intercambios y las cesiones pueden dejar varios cambios interesantes. La cosa es que para las escuadras grandes estos fichajes no suelen verse muy bien, debido a que muchos lo ven como que no hicieron bien su trabajo en verano; además de que su oportunidad de hacer grandes desembolsos no es tan fácil, porque los clubes no están dispuestos a perder a sus cracks a mitad de temporada. En el caso del equipo merengue es aún más difícil por su estatus fichar en enero; pero aún así ha hecho algunas apuestas y lo cierto es que, con más ranas en su historial, el Madrid afrontará otro mercado de invierno con los ojos abiertos por si ficha, pues tratar de no fallar.
2Adebayor cumplió en el Real Madrid
Otro de los fichajes invernales que dejó buen sabor de boca para los merengues fue el que se realizó en el 2011. Ese año sucedió el particular discurso de Mourinho en el que tras la lesión de Higuaín alegó que se quedó sin su «perro» para cazar y solo le quedaba el «gato», que fue uno de los apodos que se ganó Benzema. Por esa razón llegó uno de los tantos delanteros que han intentado desbancar al francés desde que llegara al Madrid. Ese atacante no fue otro que Enmanuel Adebayor.
Cedido desde el Manchester City, el togolés vino a aportar esos goles que tanto le faltaban al entrenador portugués y realmente los hizo. Con solo 22 partidos pudo anotar ocho goles, una cifra aceptable comparada con otros que recibieron más minutos. Esa campaña, gracias al granito de arena que puso, el equipo pudo levantar la Copa del Rey tras vencer en al final al Barcelona. Aunque al final no se hizo efectiva la opción de compra, a pesar de que tenía la confianza de Mourinho, el atacante africano contribuyó bien en el Real Madrid.