Aunque la mayoría de las personas no son muy fans de hablar acerca de la muerte y de todo lo que ello conlleva, lo cierto es que, desde un punto de vista práctico, no nos queda más remedio que dedicarle cierto tiempo de nuestra vida a esto.
En muchos países occidentales, todo lo que rodea a la muerte es un tema bastante tabú; sin embargo, en otras partes del mundo un rito funerario se convierte en un motivo de celebración y una forma única de honrar a aquellos que ya no están entre nosotros.
Al más puro estilo de las tradiciones para el día de Todos los Santos en España o para el Día de Muertos en México, en el post de hoy queremos hablar acerca de cómo el mundo ve este proceso por el que todos, algún día, tendremos que pasar.
De esta forma, en el artículo de hoy hemos querido recoger algunas costumbres y curiosidades relacionadas con el mundo funerario que, desde nuestra perspectiva, pueden parecer extrañas, pero que se siguen dando a día de hoy en todo el mundo.
Fotografías post mortem
Una de las tradiciones más comunes en la Europa del siglo XIX, a raíz del nacimiento de la fotografía, consistía en fotografiar los cuerpos de los muertos junto a su familia o en su propia casa para simular que continuaban vivos y tener un recuerdo familiar. Estos retratos conmemorativos de luto se trasladaron rápidamente a América donde se volvieron toda una tendencia, sobre todo, en países como Argentina. Hoy en día esta es una tradición que ya no se lleva tanto a cabo, sin embargo, dio pie a otra costumbre con mejor acogida en nuestros tiempos: los retratos artísticos.
Los colgantes para cenizas
Una de las costumbres funerarias que más ha llamado la atención en los últimos años, con la estandarización de la incineración, es la creación de recuerdos únicos que nos permitan llevar a nuestros seres queridos fallecidos cerca nuestra cada día. Un buen ejemplo de esto pueden ser los colgantes para cenizas de siemprepresente.es, una forma de recordar a los que ya no están con una pieza de joyería que podemos guardar en casa o llevar siempre en nuestro cuello. Sin duda, una forma original y muy sentimental que puede ser perfecta para muchísimas personas y familias en todo el mundo.
Desentierro anual
En muchas culturas del mundo, donde la concepción de la religión no es tal y como la conocemos en occidente, se dan todo tipo de costumbres muy alejadas a lo que conocemos. Una de ellas es el desentierro anual que llevan a cabo en algunas zonas de Madagascar, por la cual cada cierto tiempo retiran a sus seres queridos de sus tumbas, los envuelven en tela y los llevan en un paseo alrededor de la localidad.
Enviar las cenizas al espacio
La última tendencia en costumbres funerarias es, sin duda, la de enviar las cenizas al espacio exterior. En este caso, se incinera a la persona fallecida, se introducen sus cenizas en una cápsula y se envían al espacio en una ceremonia que muchas empresas ofrecen ya en formato streaming para sus familias. Sin duda, se trata de una costumbre original que verdaderamente puede servir para que muchas familias encuentren una manera especial de despedir a sus seres queridos.
La naturaleza como tumba
Los nichos, los féretros y los mausoleos son una tradición muy arraigada a la religión cristiana. Sin embargo, en otras culturas que disfrutan de otras religiones, este tipo de entierros no son los más comunes. Un buen ejemplo de esto es la tradición que se instauró hace siglos en las localidades cercanas a Manila, capital de Filipinas.
Los habitantes de estas localidades escogen con mucha antelación una serie de árboles que sean de su gusto, los cuales servirán de tumba cuando mueran. De esta forma, los familiares se entierran directamente en troncos de árboles ahuecados y preparados para este fin.
Música y muerte en Nueva Orleans
Nueva Orleans es, probablemente, la ciudad de Estados Unidos más conocida a nivel mundial por su admiración por la música, más en concreto por la música jazz. En esta ciudad se respira la cultura musical por los cuatro costados y, por este motivo, no es de extrañar que una de sus más conocidas tradiciones sean montar auténticos conciertos en las procesiones fúnebres, dirigidas normalmente por una banda de música.
Conforme avanza la procesión, el tipo de música va cambiando, tocando al inicio melodías más tristes o melancólicas que, después de un tiempo, dan lugar a animadas melodías de jazz y blues mucho más optimistas.
Ofrecer la carne a las aves
Otra de las tradiciones más extrañas entorno a la muerte que se siguen practicando en la actualidad es la de ofrecer la carne de los difuntos a las aves necrófagas (también conocidas como aves carroñeras. Normalmente, esta tradición es llevada a cabo sobre todo en zonas de creencias budistas que ven este ritual como una forma de liberar el alma, acompañando a la creencia de que el cuerpo es únicamente un contenedor para la esencia humana. De esta manera, se devuelve a la naturaleza todo lo que dio a la persona para que pudiese vivir su vida de la mejor forma.