Después de muchos dimes y diretes, y de que la propia Blanca Romero confirmase su ausencia en «Yerma», la asturiana ha cambiado de opinión y, contra todo pronóstico, será la protagonista del espectáculo al lado de Rafael Amargo durante las próximas dos semanas.
A tan sólo unas horas de su esperado estreno, hemos podido hablar con Blanca después de ultimar los últimos detalles de la obra y realizar los últimos ensayos. La actriz, sonriente, confiesa que tiene «mucha ilusión y muchas ganas» de subirse al escenario. «Nerviosa estoy lo justo. Los nervios justos de hacer algo que no sabes y que es nuevo, pero bien», asegura.
Acerca de cómo la ha recibido Rafael Amargo, Blanca confirma que le ha dado algún que otro consejo y que le ha cuidado «un montón», «cariñosísimos todos los compañeros», afirma sonriente. Sin dudarlo, y dejando a un lado la polémica por su supuesto abandono de la obra, la asturiana señala que «siempre» ha apoyado al bailarín «y siempre a favor de la obra, que es lo primero». «Hay que querer al prójimo como a tus hijos», dice la actriz sobre su relación con Amargo, en cuya inocencia no ha dudado ni un momento.
Sin embargo, Blanca prefiere mantenerse al margen de la vida de su exmarido, Cayetano Rivera, que muy unido a sus hermanos Francisco y Kiko, ha emprendido una lucha para recuperar los objetos de su padre.