Aguacate: platos que puedes preparar con él para Nochevieja

-

En pocas horas celebraremos la Nochevieja, ya que es la última noche de este peculiar 2020. Quizá aún no sabes qué vais a cenar ese día, así que vamos a darte ideas de platos con aguacate.

Hasta hace no mucho, casi solo podía encontrarse el aguacate en forma de guacamole, pero desde hace años esto ha cambiado. Al aguacate se le ha dado al fin la importancia que merece y se le han reconocido sus muchos beneficios.

Así que, si aún no sabes qué vais a cenar en Nochevieja o, incluso si lo sabes, echa un vistazo a estas recetas porque van a entrarte ganas de probar estos platos con aguacate.

3
TARTAR DE SALMÓN Y AGUACATE

Si quieres preparar este plato para cuatro personas, necesitarás los siguientes ingredientes:

  • 300 g de salmón fresco sin piel ni espinas
  • 5 ml de vinagre de manzana
  • 30 ml de aceite de oliva virgen extra
  • Zumo de limón
  • 5 ml de salsa de soja
  • 5 ml de salsa Worcestershire
  • 30 g de tomate
  • 60 g de aguacate
  • 30 g de cebolleta
  • Sal

Pica muy finamente el salmón, lo ideal es que utilices un cuchillo muy afilado para evitar machacarlo. Coloca el salmón picado en un cuenco y condiméntalo con el aceite de oliva virgen extra, el vinagre, la salsa de soja, el zumo de limón y la salsa Worcerstershire. Sazónalo a tu gusto, pero ten en cuenta que la salsa de soja contiene bastante sal, así que procura no pasarte. Cubre el cuenco que contiene todo con un papel transparente y deja que macere durante treinta minutos en la nevera.

Mientras está en la nevera, pela la cebolleta, el tomate y el aguacate y lo picas todo finamente. Recuerda que tienes que retirar las semillas del tomate y para que su piel salga fácilmente, puedes hacerle un corte en la base y escaldarlo con agua recién hervida durante un minuto, después lo refrescas con agua helada, así la piel saldrá con facilidad.

Cuando hayan pasado los treinta minutos de reposo, agrega a la mezcla el aguacate, el tomate y la cebolleta picados al salmón. Remuévelo todo y pruébalo por si tuvieras que añadirle algo más de sal. Vuelve a cubrirlo todo con papel transparente y déjalo otros treinta minutos más en la nevera. Una vez transcurrido el tiempo lo tendrás listo para servirlo como tú quieras.