Hoy queremos contarte los motivos por los que puede que tus toallas no sequen bien. Te decimos por qué pasa y qué puedes hacer para que no te ocurra más. Todos tenemos claro que las toallas sirven para secar y especialmente para secarnos después del baño, de la ducha y también de lavarnos la cara o asearnos las manos.
Sin embargo, hay veces en las que damos con toallas que nos dejan una sensación de humedad muy desagradable. En ocasiones ocurre tras pocos meses o semanas de haber comprado las toallas. Puede que estas se queden demasiado mojadas y que incluso puedan oler mal por ello.
4El rizo otro de los factores a tener en cuenta
Por otro lado, debemos tener en cuenta el rizo, este puede ser principalmente de tres clases: el rizo convencional, el rizo americano y el rizo de baja torsión.
Las toallas que emplean el rizo convencional suelen ser las más sencillas. Para fabricarlas se emplean fibras cortas con gramajes comprendidos entre los 350 y los 400 gramos por metro cuadrado. Es un rizo de hilo doble y estas son las toallas que normalmente encontramos en la hostelería por ser mucho más económicas.
El rizo americano se emplea para las toallas más costosas. Su característica principal es la de estar torsionado, esto es lo que hace que la toalla parezca tener más volumen y que resulte más densa al tacto. Para fabricarlas se utilizan fibras más largas. Una característica del rizo americano es que utiliza menos parafina en el hilo con lo que el rizo se acaba despeinando más que en las toallas de rizo convencional.
Por último, tenemos las toallas de baja torsión o no torsionadas para las que se emplea una fibra más larga que en el rizo americano. Se caracterizan por tener un tacto muy suave, son llamadas incluso toallas nube y que consiguen aportar una absorción mucho mayor que las de rizo convencional.