Cuando eres la hermana de la Reina de España, pasar desapercibido no resulta una tarea fácil. Pero Telma Ortiz, obstinada en su empeño, quiso que su imagen y la de su novio, el abogado irlandés Robert Gavin Bonnar, no fuera captada en Barcelona durante su reciente escapada romántica e intentó por todos los medios que no se les fotografiase
En la ciudad condal Telma estuvo empleada en el departamento internacional del Ayuntamiento y luego fue fichada por la escuela de negocios Eserp antes de trasladarse a Madrid y fue allí donde se captaron las primeras imágenes junto a Robert Gavin. Ahora la pareja ha realizado una escapada romántica para disfrutar de la ciudad que vio nacer su romance, con la Navidad a la vuelta de la esquina. La hermana pequeña de la Reina Letizia quiso que su larga melena ocultara su rostro y, tras una ruta turística caminando por las calles de Barcelona, optaron por visitar un centro comercial donde se sintieron a salvo de los focos y pudieron seguir siendo fieles a la discreción que los caracteriza.
Como fiel es a su estilo desenfadado, Telma escogió para esta ocasión un mini vestido tipo jersey de punto que combinó con botas invernales de caña alta rematadas en pelito y cazadora de cuero, ambas en color crudo.
Telma y Robert fijaron su residencia en una exclusiva zona del norte de Madrid en el último trimestre del año pasado. Allí han vivido un cómodo confinamiento junto a Amanda, la hija de Telma de 12 años, fruto de su relación con Enrique Martín Llop, y quien no acompañaba a la pareja en esta escapada.