Los belenes vivientes, con personas de carne y hueso, comienzan a tener auge a mediados del siglo XX en los pueblos de España como una tradición que tiene muchos matices según cada pueblo. Estos belenes permanecen hasta la llegada de los Reyes. Pero este año el Boletín Oficial de Madrid publica la orden de las restricciones navideñas y así se hará en todas las comunidades por el Covid-19.
En ese sentido, cada nacimiento viviente tiene una propiedad y algunos hasta un propósito que los hace único. Los hay donde un narrador es el encargado de leer un párrafo de la Biblia que ilustra sobre el nacimiento del Niño Dios. En otros, los vecinos organizados hacen una obra teatral del sagrado momento.
Como la navidad es la época de la solidaridad algunos belenes vivientes sirven para recaudar dinero destinado a obras sociales. Existen en algunos pueblos, los certámenes de belenes que son premiados.
No debemos dejar de nombrar los belenes infantiles en el que participan niños entre 6 y 16 años. En todo caso, por acá le haremos un recorrido para recordar algunos belenes vivientes muy realistas en diversos pueblos españoles.
2Los pueblos y su manera de representar los belenes vivientes
En Buitrago del Lozoya (Madrid) se celebra desde finales de los años 80. Es el más importante, entre otras cosas porque tiene un escenario ideal: las antiguas murallas con actores que aguantan inmóviles las noches frías. Las escenas se suceden a lo largo de las iluminadas murallas. En la representación hay muchos animales de verdad sobre todo en el mercado: conejos, perdices y gallinas.
Mientras que en Colmenar de Oreja, es la única representación de belén viviente en la Comunidad de Madrid, que aborda esta historia desde el punto de vista de obra teatral con una duración de 45 minutos. Se desarrolla en la plaza porticada y participan unos 130 vecinos. Comienza con la Anunciación y finaliza con la escena del portal, siempre con un niño recién nacido. Hay lugares mágicos en España para celebrar la navidad.