Casado pide al Gobierno que atienda a las familias que piden «libertad» para elegir la educación de sus hijos

El presidente del PP, Pablo Casado, ha acusado al Gobierno de coalición de dejar «abandonados» a los españoles, poniendo como ejemplo la tramitación de la LOMLOE, la reforma educativa más conocida como ‘Ley Celaá’. «Este Gobierno de los líos deja abandonado a los españoles para ocuparse de sus luchas internas», ha señalado en declaraciones a los medios tras asistir a la concentración de este domingo en Madrid convocada por la Plataforma Más Plurales para protestar contra la nueva norma educativa.

Según ha indicado Casado, quienes se están manifestando hoy contra la Ley lo único que hacen es «pedir libertad» y lo hacen, según el presidente ‘popular’, tanto las familias de la educación concertada, como de la especial y hasta «los padres de la pública», que quieren seguir teniendo «libertad para elegir el modelo educativo y el colegio» de sus hijos.

Tal y como ha asegurado, el «compromiso» del PP en cuanto esta Ley se apruebe es recurrirla ante el Tribunal Constitucional (TC) y las instituciones europeas, así como derogarla en el momento en que el PP acceda al Gobierno e «intentar parar los estragos» de la norma en las comunidades donde el PP gobierna.

En este sentido, Casado recuerda cómo en las últimas semanas la Comunidad de Madrid ha anunciado el adelanto del plazo de inscripción para los alumnos; cómo en Galicia seguirá el castellano siendo vehicular en la enseñanza; que en Murcia se darán «más posibilidades» a los conciertos educativos; en Castilla y León no se permitirá pasar de curso con varias materias suspensas; y en Andalucía se va a «garantizar la libertad de elección de centro».

El modelo educativo que defendemos es el que la mayoría de españoles quieren: libertad, calidad y vertebración; ¿qué más le tienen que decir a Sánchez para que escuche a la calle», se pregunta Casado, que también pide al Ejecutivo que «escuche» a los tribunales y a Europa. Y ha puesto de ejemplo la sentencia de este 16 de diciembre del TSJC, que obliga a la Generalitat de Catalunya a establecer un mínimo del 25% de la enseñanza en castellano.

Por otro lado, ha pedido también a Sánchez «que se coordine» en materia sanitaria para gestionar la crisis de cara a las Navidades, dando un «marco global» para estas fiestas, de modo que después las autonomías puedan decidir medidas dependiendo de la incidencia que tengan en sus territorios. «Una cosa es cogobernanza y otra desgobierno», ha zanjado.