La sal es un elemento básico de nuestra cocina, pero el consumo de sodio y la hipertensión están relacionados. Es por esta razón que últimamente está siendo ‘perseguida’, junto con el azúcar, especialmente por aquellos que han decidido hacer de la comida sana su bandera. Pero la sal también es necesaria, así que la virtud estará en el término medio.
La sal no solo potencia el sabor de los platos, sino que se hace imprescindible para que el organismo digiera las comidas y absorba sus nutrientes, por ejemplo. Este elemento que durante la antigüedad fue usado hasta como moneda de cambio (de ahí viene lo de salario) tiene diferentes propiedades que hay que conocer bien para distinguir las mejores en el supermercado. En esta lista te especificamos cuáles son las más saludables.
2SAL MARINA SIN REFINAR
La sal marina es un tipo de sal sin refinar tomada directamente del mar. Para ello, por ejemplo, se canaliza el agua a salinas o grandes bandejas de agua. Allí el sol hace el resto del trabajo. El mar se va evaporando con la ayuda del viento hasta quedar el producto que buscamos,
Por este proceso de evaporación encontramos en la sal trazas de hierro, magnesio, calcio, potasio, manganeso, zinc y yodo. La ventaja de la sal marina es que es más saludable que la fina de mesa, la más común. Es un tipo de sal muy usada en los hogares y conocida por todos, y puede usarse con cualquier alimento.