Roma es el sueño turístico de personas de todas partes del mundo. Su historia, su cultura, su arquitectura atraen a cualquiera que desee conocer más de una de las civilizaciones más grandes de Occidente. Es un viaje que vale la pena hacer al menos una vez en la vida, independientemente del momento que sea.
Un buen plan es la clave
Estar en Roma es en sí mismo una experiencia, aunque es verdad que hay visitas que son casi obligatorias de hacer. Todas ellas son muy demandadas por los visitantes, así que conviene planificar bien el tiempo para no hacer colas innecesarias. Henar y Aitor, bloggers de viaje de Cómete el Mundo, recomiendan visitar Roma en 3 días adquiriendo las entradas online.
Visitar Roma es caro. Los hoteles son bastante costosos por la alta demanda, incluso los más sencillos. Lo mejor es organizarse bien para visitar todos los puntos de interés con calma, pero sin desperdiciar tiempo.
La alta demanda hace que abunden las colas para comprar las entradas, además de las multitudes en casi cualquier punto de interés. La organización es esencial para evitar esta cantidad de personas, dentro de lo posible. Esto va a permitirte tener la oportunidad de ver todo lo que quieras sin tener tanta prisa para no gastar de más en hospedaje.
La llegada
Hay dos aeropuertos, pero están lejos del centro de Roma. En ambos casos, tienes que tomar transporte para llegar a tu destino. Lo mejor es que ya tengas esto planeado para no perder tiempo resolviendo cómo vas a trasladarte a tu destino. Lo más cómodo es contar con traslado privado, pero también tienes opciones de transporte público.
Podrías tomar el autobús, que cuesta 5 euros, y queda a unos 40 minutos o 1 hora, dependiendo del aeropuerto al que llegues. En cambio, desde el aeropuerto Fiumicino puedes tomar un tren directo hasta la ciudad por un precio de 15 euros; sale cada 30 minutos y el trayecto dura lo mismo.
Optimizar el tiempo
Lo mejor es escoger un hotel céntrico a pesar de que sea un poco más costoso, al menos si tu plan es visitar los destinos turísticos más populares. De esta manera, te evitas gastar tiempo en el transporte público, e incluso te puede salir más o menos al mismo precio al final. Eso sí, procura hacer la reservación con antelación.
Por otro lado, debes hacer todo lo posible para evitar las colas interminables. Las entradas del Coliseo y del Vaticano son muy codiciadas, por lo que se forman filas de 2 horas apenas comienza el día. Es demasiado tiempo, aparte de que cansa mucho. Al menos para estos dos lugares, viene bien adquirir las entradas por Internet antes del viaje.
Los guías turísticos
Hay que pensar que Roma guarda mucha historia, pero también es verdad que solo quedan ruinas en varios lugares. Los guías turísticos te van a ayudar a comprender todo lo que estés viendo, aparte de llevarte por los lugares más importantes. De hecho, incluso podrías conseguir un buen precio si compras paquetes por más de un tour.
Recomendaciones finales
Cada quién puede hacer el viaje como quiera, aunque hay algunos detalles que se deberían tomar en cuenta para hacer más grata la experiencia.
- Llevar un buen calzado. Piensa que vas a caminar mucho, así que procura llevar zapatos cómodos para no sentir molestias después de caminar un par de horas. Lo más adecuado es el calzado deportivo.
- Salir temprano. Hay mucho que ver y poco tiempo. Sal temprano para aprovechar la luz del sol y ver con claridad todos lo que Roma tiene para ti.
- Comer afuera. Piensa que quizás no quieras perder tiempo regresando al hotel para el almuerzo. Puedes comer en restaurantes o llevar las viandas con comida que sea rica de comer fría.
Como puedes ver, tampoco hay que hacer hacer nada del otro mundo para tener una buena experiencia en Roma durante 3 días y que el tiempo sea suficiente. Es cuestión de organizarte, de planificar con algo de antlación. De esta manera, podrás disfrutar de la ciudad de los emperadores y gladiadores sin gastar demasiado dinero.