El leasing es también conocido como arrendamiento financiero, el cual consiste en que una entidad financiera compra un bien a su nombre y lo arrienda a mediano o largo plazo al cliente que lo solicita. Una vez que el tiempo del contrato culmina, el cliente decide si comprar el bien, renovar el contrato o devolver el bien a la entidad financiera. Existen distintos tipos de leasing, pero los más importantes son los siguientes:
- Leasing operativo: el cual es un arriendo sin opción a adquisición del bien.
- Leasing financiero: que es un arriendo que te ofrece la opción de adquirir el bien a un determinado plazo.
Ejemplo de leasing
Supón que eres el propietario de un restaurante muy popular en tu ciudad y algunos de tus amigos y clientes te han sugerido la idea de un servicio de entrega a domicilio para aumentar tus ventas.
Luego de estudiar la posibilidad decides llevar a cabo la idea y planteas un método de entrega a través de bicicletas. Pero como no tienes conocimiento en esa clase de servicios, y por ende consideras que tal vez no es una idea del todo segura como para invertir de forma inmediata. Es por lo que decides solicitar a tu banco un arrendamiento financiero y alquilarlas por un periodo de tiempo, y según cómo se vaya desarrollando el servicio, decidirás si comprarás las bicicletas o no.
A cambio deberás pagar por el alquiler, el cual incluye intereses y amortizaciones. Una vez que el plazo de tiempo estipulado por el contrato de arriendo haya culminado, deberás decidir si vas a comprar las bicicletas, renovar el contrato o devolverlas de forma definitiva.
Debes tener en cuenta que la cuota de amortización es un gasto tributario, por lo que el valor total del activo, a excepción de la cantidad de la opción de compra, se rebaja como gasto en un periodo que puede ser menor al dela depredación acelerada. De esta forma la empresa podrá obtener importantes ahorros tributarios.
Bienes que se pueden financiar
Estos son algunos ejemplos de los bienes que se pueden financiar mediante el leasing:
- Tecnología: Ordenadores, software, hardware, teléfonos, equipos de impresión, entre otros.
- Equipos de producción: como maquinaria industrial y equipos especializados para ese tipo de trabajos.
- Inmuebles: Locales, bodegas, oficinas, almacenes, plantas industriales.
- Vehículos: Coches, motos, camiones, buses.
- Habitacional: Apartamentos o casas, ya sean nuevas, usadas o sobre planos.
El leasing es unas de las muchas opciones que existen en el mercado, puedes estudiar y evaluar cuál es la que mejor se adapte a tus necesidades y luego podrás solicitar a tu banco un arrendamiento financiero a mediano o largo plazo.
Consideraciones a tomar
Antes de de llevar a cabo el leasing, debes tener en cuenta lo siguiente:
- Debes tener en cuenta que, durante el plazo de tiempo estipulado en el contrato, la entidad bancaria (arrendador) también es dueña del activo, pero a la vez no es responsable de cualquier clase de de daño, pérdida o deterioro de este.
- Además, el arrendador puede exigir inspecciones periódicas del activo.
- El mantenimiento de los activos adquiridos mediante el arrendamiento financiero, corre por parte del arrendatario.
Ventajas y desventajas del leasing
Lo bueno de contar con un arrendamiento financiero es:
- Con un arrendamiento financiero puedes invertir hasta el 100% del valor de los activos.
- Puedes obtener algunas ventajas fiscales importantes.
- Renuevas con rapidez la tecnología de los activos.
- Evitas invertir en bienes que se pueden devaluar con rapidez y que difícilmente podrás vender.
- No necesitarás realizar un pago de cuota inicial.
- Te mantienes libre de endeudamientos.
- El leasing es flexible en cantidades, plazos y acceso a servicios.
- Te permite conservar las condiciones de venta al contrato.
- Reduces la conservación del capital de trabajo.
- El leasing es una operación rápida.
Pero no todo es un lecho de rosas, lo no tan bueno del leasing es lo siguiente:
- En caso de acceder a comprar el bien, solo podrás acceder a su propiedad una vez que se haya finalizado el contrato de arrendamiento, no antes.
- No puedes entregar el activo hasta que se haya finalizado el plazo del contrato de arrendamiento.
- Existen algunas clausulas penales previsivas por el incumplimiento de obligaciones contractuales.
- En ocasiones el coste del leasing puede ser mayor al de otras formas de financiamiento, particularmente si ocurren descensos en los tipos de interés.
- Es posible que una vez que el plazo del contrato haya finalizado, deberás pagar un monto adicional por aquellos que haya disminuido el valor de reventa de los activos.
Finalmente, debes saber que el leasing te permite el mantenimiento de la propiedad de tu empresa. Eso quiere decir que, en caso de que no poseas un arrendamiento financiero, se podría presentar el escenario en el que vas a necesitar una fuente de inversión para más equipos, por lo que es posible que necesites financiar tu proyecto con aumentos de capital o la emisión de acciones de pago, lo que en la mayoría de los casos, implicaría la división de la propiedad de la empresa entre los nuevos socios que se vayan a adherir y que por consiguiente se reduzca tu grado de control sobre la empresa.
¿Qué te ha parecido? ¿Vas a considerar solicitar un contrato de arrendamiento financiero para tus nuevos proyectos?