Cada día más personas consumen miel. Es un alimento natural que edulcora, tonifica y calma. Todas esas personas que no pueden consumir azúcar, tienen aquí una estupenda opción para hacer más dulce su café o la leche del desayuno. Sin embargo, no todas las mieles son puras. Entre otras propiedades, es curativa y energizante. Además, es laxante y diurética. Pero, aunque nos pensemos que la fabrican los humanos, nada más lejos de la realidad. La miel es un producto realizado por las abejas.
Hay una gran variedad de mieles en el mercado. Dependiendo del polen de unas flores u otras, la miel puede cambiar de sabor, de color e incluso de textura. Sin embargo, no todo lo que nos venden. Algunos empresarios, para maximizar sus beneficios, le echan algunos químicos a la miel pura para sacar más cantidad. Otras fábricas no la venden pura, si no que la pasteurizan. Vamos a ver qué formas tenemos para detectar si este beneficioso ingrediente es puro o nos la están colando.
7Otros consejos sobre la miel
Hay otros consejos para saber si la miel es verdadera y pura o si tiene aditivos. Siempre deberemos leer la etiqueta de nuestro bote. En los ingredientes, si hay jarabe de maíz con fructosa o glucosa, mejor que no la compres.
Otro de los consejos sobre que quizás no sabes es que nunca debes darle a un recién nacido. La miel puede tener esporas de botulismo. Para los adultos es inocuo, pero a los niños puede generarles una enfermedad muy grave.
También hay que tener cuidado cuando la manipulamos al lado del fuego y la cera caliente. Y es que, como dijimos antes, es inflamable y puedes tener un disgusto.