Francisco Trincao tuvo un inicio sólido en el FC Barcelona pero, mientras las jornadas seguían avanzando el jugador proveniente del Sporting de Braga fue perdiendo su brillo, a tal punto que no sale del banquillo. Para Ronald Koeman ha sido un gran problema, ya que el portugués era la gran esperanza del Barça para blindar la banda derecha.
Las lesiones del joven Ansu Fati y el francés Ousmane Dembélé no han ayudado y aunque el técnico holandés ha intentado darle oportunidades al joven de 20 años, el portugués sigue sin destacar y ni generar goles, algo bastante importante en este punto.
Después de 15 partidos oficiales, el jugador de la banda derecha no ha sido capaz de marcar un tanto en lo que va de torneo. En la Champions ha jugado solo cinco partidos y se ha hecho de dos tiros sin resultado, mientras que en La Liga lleva uno en los pocos minutos que ha tenido en los diez partidos disputados por el club azulgrana.
Trincao suma 492 minutos con la camiseta blaugrana y aunque su rendimiento no ha sido malo, tampoco fue el esperado. Ahora no es ni la sombra de la estrella del Braga que impresionó a todo el mundo y que llegó con tantas expectativas y ganas de ser uno de los mejores, tanto así que el Barça descartó desde el principio la posibilidad de una cesión.
El jugador ha empezado a hacer menos dribblings y, en ocasiones, se traba con el balón, evitando fluidez en sus jugadas denotando su falta de confianza y seguridad dentro del campo.
Trabajo por hacer
En el partido contra la Juventus tenía una gran oportunidad de volver a ganar la confianza del equipo, pero no estuvo a la altura en los primeros minutos del encuentro por lo que Koeman lo sustituyó. El portugués deberá trabajar al máximo y poner un gran esfuerzo en los próximos partidos para demostrar que vale la pena tenerlo en el terreno y con Dembélé fuera y Ansu lesionado, tiene media temporada para volver a demostrar su nivel el cual poco, no es.
Por otra parte, hay que recordar que las elecciones están a la vuelta de la esquina para escoger al próximo presidente del conjunto azulgrana, lo que puede poner en riesgo su estadía en el club. Definitivamente lo que queda de temporada sera crucial para el portugués, que además ha tenido la suerte de que Koeman haya respetado su posición y no lo haya rotado.
El extremo derecho tiene un gran potencial, ademas de ser veloz y versátil en el campo también cuenta con una gran visión de juego, solo le falta confianza y si no logra solucionarlo en los próximos meses, su tiempo en el Barcelona pueda que termine mas rápido de lo que todo el mundo esperaba.
