Uno de los grandes referentes dentro del mercado de los procesadores para móviles, es sin lugar a dudas Qualcomm. La firma americana es la encargada de dotar a los móviles de la gama más alta de sus soluciones. Y su último procesador, el Snapdragon 888, es la bestia más potente jamás vista.
Un SoC que presume de una arquitectura FinFET de 5 nanómetros para ofrecer un rendimiento y una eficiencia fuera de toda duda. ¿Lo mejor? Que este procesador Snapdragon 888 de Qualcomm será el encargado de dar vida a teléfonos de la talla del Samsung Galaxy S21. Por ello, vamos a explicarte todos los secretos de este potente procesador para móviles.
3Samsung y Qualcomm se alían para fabricar el Snapdragon 888
Como decía el gran maestro de la guerra Sun Tzu, «si no puedes con tu enemigo, únete a él«. Y es justo lo que ha hecho Qualcomm, al forjar una alianza histórica con Samsung. Según el acuerdo entre la firma americana y el fabricante con sede en Seúl, los terminales de Samsung serán los primeros en montar el próximo buque insignia de procesadores Qualcomm.
Y a cambio, Samsung está siendo el encargado de fabricar los procesadores Qualcomm Snapdragon 888. ¿El motivo? El gigante coreano cuenta con diversas fábricas especializadas en la fabricación de procesadores.
Y gracias a ello, son capaces de operar en arquitectura FinFET de 5 nanómetros. Seguramente te habrás quedado igual, ¿verdad? Que sepas que FinFET es sencillamente un proceso de fabricación que, en función del número de nanómetros, consigue mejores resultados.
En este caso, cuando menor sea la cifra (más pequeño) mejor. ¿El motivo? Esto de los 5 nanómetros está relacionado con el tamaño de los transistores que forman cualquier procesador. Al conseguir que sus dimensiones sean mucho más reducidas (lo normal son procesadores de 8 o 12 nanómetros) se consigue añadir más transistores en la placa.
Y esto se traduce en dos grandes ventajas: por un lado se mejora notablemente el rendimiento y la potencia del procesador Snapdragon 888, sencillamente porque hay más transistores ya que ocupan menos espacio.
Además, al estar más juntos de lo habitual, la eficiencia energética es tremenda, haciendo que un teléfono con procesador Qualcomm Snapdragon 888 ofrezca una mejor autonomía, un gran detalle a tener en cuenta.