Uno de los grandes referentes dentro del mercado de los procesadores para móviles, es sin lugar a dudas Qualcomm. La firma americana es la encargada de dotar a los móviles de la gama más alta de sus soluciones. Y su último procesador, el Snapdragon 888, es la bestia más potente jamás vista.
Un SoC que presume de una arquitectura FinFET de 5 nanómetros para ofrecer un rendimiento y una eficiencia fuera de toda duda. ¿Lo mejor? Que este procesador Snapdragon 888 de Qualcomm será el encargado de dar vida a teléfonos de la talla del Samsung Galaxy S21. Por ello, vamos a explicarte todos los secretos de este potente procesador para móviles.
1Qualcomm está perdiendo su hegemonía en el sector
Lo cierto es que Qualcomm está perdiendo el liderazgo que históricamente tenía dentro del mercado de los procesadores para móviles. Y el problema ha sido el de siempre: confiarse demasiado y no fijarse en sus rivales.
Tras años dominando con puño de hierro el sector, Qualcomm se permitía lujos como que su SoC Snapdragon 845 sufriera graves problemas de sobrecalentamiento. Esto trajo de cabeza a los fabricantes, ya que sus principales buques insignia se calentaban como una plancha, haciendo que el usuario notase ese aumento de temperatura en el terminal.
Y claro, poco a poco MediaTek, el gran rival chino de Qualcomm, ha ido creciendo. A día de hoy, no es capaz de plantar cara a las soluciones del fabricante americano, pero es un hecho evidente que la familia Helio de MediaTek ya puede competir de tú a tú con los procesadores de gama media de la gran Q (los Snapdragon de la serie 600 y 700). Así que, están a un paso de ser capaces de plantar cara al Snapdragon 888.
