Es normal que con el tiempo el cuero se vaya desgastando hasta que finalmente se desgarra. Pero si consideras que aún no es el momento de deshacerte de esa reliquia familiar o crees que fue demasiado costoso como para tirarlo al basurero por un desgarre, entonces puedes seguir esta guía con la cual podrás restaurar y reparar ese sofá de cuero que tienes en casa.
No importa si solo se trata de un simple raspón o de un daño serio, si cuentas con algo de tiempo y los aditamentos adecuados, no solo podrás reparar el daño que haya sufrido sino que también podrás devolverle un poco de su gloria original para que así dure unos cuantos años más sin perder el estilo.
Refuerza
Para los daños profundos primero debes reforzar, para ello debes cortar un trozo de parche inferior, este es un refuerzo para proteger el sustrato bajo el cuero y al mismo tiempo facilitar la reparación. Este aditamento puedes conseguirlo en los kit de reparación de cuero. En caso de que no cuentes con uno de estas herramientas puedes optar por usar un pedazo de cualquier tela flexible y fuerte. Debes cerciorarte de que el parche inferior sea más grande que la rasgadura.
Luego solo debes introducir el parche inferior por debajo del agujero, puedes ayudarte con un par de pinzas. Después tendrás que alisar los pliegues y las arrugas.
Después tendrás que pegar el parche inferior, para ello puedes usar un mondadientes o una aguja grande. Aplica una fina capa de pegamento por todas las zonas en las que el parche y el cuero estén en contacto, para después aplicar un poco de presión firme y uniforme con un libro. Debes limpiar el exceso de pegamento y dejar que el pegamento se seque por unos 20 minutos o según lo indique el fabricante.
Limpia y prepara
Antes de proseguir debes limpiar la zona con un poco de vinagre o alcohol isopropílico al 70%, de esta forma eliminarás los residuos de la superficie y la masilla para cuero podrá adherirse con mayor facilidad. Luego de esto tendrás que cortar las fibras que estén sueltas en los alrededores del borde de la rasgadura, así se creará una superficie nivelada entre los bordes de la rasgadura.
Ten en cuenta de que no debes excederte con el alcohol o el vinagre ya que podría dañar las capas de brillo junto con el acabado entero de la superficie del mueble. Sin contar que algunos limpiadores comerciales pueden dejar residuos en la superficie además de no limpiar del todo las manchas de grasa.
Repara y sella
Para los daños ligeros solo debes utilizar un pegamento adecuado, para ello puedes consultar con el fabricante del mueble, ya que algunos pegamentos genéricos no son del todo efectivos para pegar algunas fibras sintéticas o el cuero regenerado. Lo mejor para el cuero genuino es que consigas un superpegamento, el cual puede lograr mejores resultados que los pegamentos comunes. Para reparar el tejido de tu mueble debes hacer lo siguiente:
- Asegúrate también de aplicar una pequeña cantidad de pegamento en la zona inferior de la rasgadura, puedes ayudarte con un mondadientes o una aguja grande y así formar una fina capa de pegamento.
- Fija nuevamente la rasgadura, para ello solo debes aplicar un poco de presión mientras que el pegamento está actuando. Pero ten en cuenta que debes mantener nivelada la rasgadura para que así no queden visibles ningún tejido que esté bajo el cuero.
- Una vez que el pegamento se ha secado, debes proceder a lijar con cuidado la zona en la que usaste el superpegamento. Para ello vas a necesitar contar con un papel de lija de grano 320, ya sea húmedo o seco, esto causará que los residuos causados se adhieran al aún húmedo pegamento y cree una clase de masilla que ayudará a fijar la rajadura. Lo mejor es lijar en dirección en la que está abierta la rasgadura y dejar la superficie completamente lisa. Puedes usar una lija de grano 500 para el cuero fino y delicado.
En cambio, si se trata de una rasgadura profunda aplica la masilla con ayuda de de la espátula del kit de reparación de cuero, debes aplicar la masillas para sellar las posibles aberturas entre los bordes de la rasgadura. Además de que tienes que asegurarte de extender bien el producto y eliminar el exceso para dejar la superficie de masilla lisa y nivelada, además de difuminar los bordes de la rasgadura. Finalmente deberás dejar que se seque según las indicaciones del producto
Tinte y acabado
Después puede comenzar a teñir el cuero de tu sofá. Pero para ello debes primero consultar la etiqueta del fabricante y confirmar cuál es el tinte adecuado para ese tipo de cuero, puedes comprobar al aplicar un poco de tinte en una zona poco visible. Luego puedes comenzar a aplicar el tinte sobre la zona raspada, pero en caso de que el color sea distinto puedes aplicarlo con ayuda de una esponja húmeda para luego dejar que se seque.
Finalmente solo te quedará aplicar un acabado sobre el cuero, ya sea para darle brillo y para protegerlo.
Ya solo debes dejar que el pegamiento se fije. Para ello es mejor que haya transcurrido al menos 1 hora antes de que puedas flexionar la superficie de la tela. Esto le permitirá al pegamento que el cuero se fije sin correr el riesgo a que se despegue de nuevo. Evita usar alguna secadora ya que el calor puede dañar el cuero, lo mejor es dejar que el pegamento se seque solo.