La miel es uno de los superalimentos que nos proporciona la naturaleza. Es un alimento que consumido con moderación dentro del marco de una dieta equilibrada puede aportarnos muchos beneficios y contribuir a nuestro bienestar. De hecho, son diversos los estudios que se han realizado sobre los posibles beneficios que puede aportar la miel en el tratamiento de diferentes enfermedades y problemas de salud.
3La miel para el cuidado de la piel
Una de las primeras cosas que se notan cuando se toma miel todos los días es que mejora el aspecto general de la piel. Las propiedades antioxidantes de la miel son una ayuda para limpiar el cuerpo de toxinas. Pero la miel también tiene importantes propiedades anti-bacterianas e hidratantes que nos ayudarán a mantener a raya las impurezas de la piel.
Además es un producto que se ha utilizado desde antiguamente para el tratamiento y la cura de heridas y quemaduras leves por sus propiedades. Algunos estudios han determinado que su consumo puede ayudar a tratar algunos desórdenes en el órgano más extenso del cuerpo.
El acné es uno de los problemas más frecuentes de la piel especialmente durante la adolescencia. La miel actúa como una agente antimicrobiano que priva a los microbios de la humedad que necesitan para sobrevivir. También reduce el PH de la piel creando una acidez que contribuye a matar a los microbios.