Durante los últimos tiempos se ha hablado mucho de la mala situación que vive el Real Madrid. Sus malos resultados preocupan, pero mucho más ver el pobre juego que despliegan y la falta de ideas que demuestran. Todo eso ha hecho que el puesto de Zinedine Zidane esté en entredicho; porque en LaLiga se están alejando poco a poco de la punta y en Champions League están muy cerca de la eliminación. El futuro del entrenador francés en ambos frentes se podrían decir muy pronto, a manos del Borussia Mönchengadbach y el Atlético de Madrid, por lo que varios nombres ya han empezado a sonar para sustituirlo y uno de los que más impresiona es el de José Mourinho.
El casting para encontrar al nuevo dueño del banquillo ya está abierto y Florentino Pérez tiene varios nombres en su lista. Aunque los dos que más suenan como favoritos son Mauricio Pochettino y Raúl González, la verdad es que hay otros cuantos más en la fila, entre ellos el portugués. El actual técnico del Tottenham es el que menos posibilidades tiene de llegar al Real Madrid, más que nada por cuestiones contractuales con su equipo; sin embargo, no son pocas las voces en la parte alta del conjunto merengue que piden su regreso y para nadie es un secreto que el mandatario blanco es un enamorado del trabajo de Mourinho, por lo que podría hacer algo para traerlo al final de esta temporada. Puede que sea complicado, pero razones no le faltarán para decir que hace lo correcto en querer repescarlo.
5Una cuenta pendiente
Para muchos, el gran error de Mourinho en el Real Madrid fue que no pudo ganar la Champions League en los tres años que estuvo al mando del equipo. Sin embargo, tanto expertos como fanáticos coinciden en que luego de esa temporada difícil en la que se ganó la Copa del Rey (2010-2011), el portugués armó uno de los mejores equipos que se recuerden; tanto es así que logró llevarse la Liga con récord de puntos y goles (100 puntos 121 goles). La cosa es que ese equipo pudo perfectamente obtener la Champions, incluso el mismo técnico luso lo ha dicho en varias entrevistas, pero la suerte de los penales lo evitó.
Las semifinales en el 2012 ante el Bayern Múnich fueron muy duras y el equipo logró llegar a una tanda de penales infartante. Aunque Casillas estuvo imperial, nadie podría imaginar que tres expertos como lo son Cristiano Ronaldo, Káká y Sergio Ramos fallarían en una misma noche, pero así fue. Al final avanzó el conjunto bávaro, que perdería sorprendentemente ese último duelo contra el Chelsea en penales. Mourinho lo intentó con los merengues y no se le dio, por lo que el sentimiento de revancha puede que siga vivo en él y en algún momento quiera volver, como lo hizo al Chelsea, para saldar esa cuenta que aún tiene pendiente.