No te desanimes si llevas unas semanas haciendo dieta y no obtienes los resultados esperados. La alimentación es una parte muy importante a la hora de perder peso, pero no es la única. El ejercicio físico y el descanso completan los pilares fundamentales de una dieta. No respetar uno de estos aspectos puede pasarte factura a la hora de subirte a la báscula.
Así que puede ser que estés controlando la comida y haciendo algo de ejercicio y no consigas perder peso. Por este motivo, te vamos a mostrar los hábitos nocturnos que te hacen engordar mientras duermes y echan por tierra todo lo que has avanzado durante el día.
2CENAR TARDE Y DEMASIADA CANTIDAD
Existe un dicho que explica muy bien por qué hay que cenar poco: desayuna como un rey, come como un príncipe y cena como un méndigo. La última comida del día debe ser ligera, ya que si cenas mucho, la digestión puede hacerse muy pesada haciendo que te cueste dormir. La cena debe ser la comida más ligera del día, en la que debes evitar tomar demasiadas grasas. Lo ideal es que cenes alimentos ricos en proteínas y vitaminas.
Es recomendable que cenes más de dos horas antes de meterte en la cama. Intenta cenar más pronto si eres de los que le gusta hacerlo justo antes de irse a dormir, ya que, de este modo, ingieres muchas calorías que no van a poder quemarse favoreciendo a que cojas peso mientras duermes y echando al traste la dieta.