Uno de los rostros más queridos de la televisión es el de Jorge Javier Vázquez. Y es que, su gran talento, y esa forma de llegarle a la gente por medio de Sálvame, ha sido una de las muestras más representativas que el nacido en Badalona ha demostrado en sus años de trayectoria. Pero claro, no es que sea un monedita de oro que le cae bien a todo el mundo y mucho menos a sus colegas en este mundo de comunicación, que suelen tener ciertos altercados en los platós, y hasta cortan la amistad.
Pues, sí, el mismísimo Jorge Javier Vázquez tiene una fama de llamar a la tertulia, aspecto que favorece al show. Sobre todo por esos temas relacionados a la forma en que lleva sus relaciones sociales en el medio. A pesar de ser polémico hasta en la médula, muchas veces ha cortado por lo sano y ha dejado que el trabajo siga fluyendo como para no ponerle más drama a esas problemáticas donde ha estado inmerso.
No es fácil llevarse bien con los periodistas, porque todos tienen su punto de vista. Desde luego, hay celos, envidias, muchos rencores que suelen afectar este tipo de vínculos. Conoce cómo ha sido la estrella de Telecinco con las supuestas amistades, y la forma en que le ha dado una patada discreta en el hígado a más de uno.
2Isabel Gemio le dijo a Jorge «feo y bajito»
Una de las guerras más duras que ha tenido Jorge Javier Vázquez es la que hemos visto con Isabel Gemio. Hablamos de la reconocida periodista y también presentadora de radio y televisión que ahora mismo tiene 59 años de edad.
La nacida en Alburquerque no es de las que se relaciona del todo bien con el más mimado de Mediaset. Y es que, ellos guardan de por sí unos rencores, que el mismo Jorge Javier Vázquez prefirió salir por la derecha y no hacer mayores tumultos.
Claro, antes le dijo que ella era una mujer «prepotente». Le destacó que solo uno podría ganar la batalla. Aquí es donde vemos las envidias, por creerse más que el otro para tener protagonismo en las pantallas. Lo cierto, es que la periodista no se quedó de brazos cruzados y le expresó que era «feo y bajito». Cada vez que pueden estos dos se lanzan sus indirectas, por eso es que no van ni a la esquina.