El Museo Guggenheim Bilbao ha presentado este jueves el proyecto del artista José Manuel Ballester ‘[2020/03/15]’, que el público podrá visitar en una de sus salas durante los próximos tres meses y que consta de una serie de fotografías que el artista realizó en el Bilbao desierto y confinado de la primavera pasada, que a su vez conviven con la obra ‘En torno al Guernica, 2009/2020’, una versión vaciada de la pintura de Picasso que transmite una mirada actualizada del evento histórico y de la tragedia humana.
Según han informado desde el Museo, en su conjunto el proyecto plantea una reflexión sobre las consecuencias de graves acontecimientos como las guerras o las pandemias. Así, el diálogo entre el Guernica ‘vaciado’ y las fotografías de la ciudad aparentemente deshabitada plantea una «interesante y abierta reflexión al espectador».
Este proyecto da testimonio de la etapa de confinamiento a través de una selección de fotografías de gran formato que reflejan calles y espacios desiertos de Bilbao como el puente de La Salve, Elcano, el Metro o la calle Bailén, arrojando una imagen «casi irreal que podría representar la vivida en cualquier lugar del mundo».
En palabras de Ballester, «la ausencia humana en la calle creaba imágenes insólitas de carreteras, avenidas y plazas totalmente vacías, pero lo más inquietante era saber que todos los habitantes estaban allí, que se encontraban a pocos metros de mí, protegidos entre los muros de sus casas. A pesar de estar tan cerca, se imponía el silencio».
Este retrato de la ciudad deshabitada tiene muchos paralelismos con la visión artística que José Manuel Ballester viene desarrollando desde hace años a través de su «impactante» serie de obras denominada ‘Espacios ocultos’, en la cual reinterpreta pinturas clave de la historia del arte vaciadas de sus personajes, dotándolas de un nuevo sentido artístico y humano.
‘En torno al Guernica’ es una reproducción fotográfica impresa sobre lino del mismo tamaño que el lienzo original de Picasso, tratada digitalmente para vaciar de personajes el espacio que integra la acción. Así, el interior arquitectónico, con sus juegos de luces y sombras, queda como testigo mudo del bombardeo de Gernika en 1937.
Ballester traslada la secuencia temporal elegida por Picasso a un momento posterior, en el que han desaparecido todos sus protagonistas pero, en palabras del artista, «permanecen presentes las señales de lo deshumano y las llamas del incendio que sigue activo, como la flor que brota de la espada».
La experiencia presencial se ve complementada por un proyecto digital que desarrolla el concepto del vacío tan presente en la obra de Ballester, accesible desde la web del Museo. Además, se ha publicado un libro que recoge la serie de veinte fotografías realizadas por el artista en las calles de Bilbao y su reinterpretación de la obra de Picasso, comentadas por Carlos del Amor.
UN PROYECTO EN COLABORACIÓN
Este proyecto se presenta al público en un tiempo de restricciones. Tras el confinamiento y cierre del Museo la pasada primavera, las actuales limitaciones de movilidad y dificultades económicas complican en gran medida que las iniciativas salgan adelante. «Es en estos momentos cuando adquieren un nuevo valor las colaboraciones y la suma de esfuerzos, el trabajar juntos para hacer un proyecto realidad», han indicado los responsables del Guggenheim.
La intervención de José Manuel Ballester sobre el Guernica y sobre las demás obras de la serie ‘Espacios ocultos’ supone, en sus propias palabras «un intento de trasladar al momento actual los acontecimientos que motivaron la creación de esas obras y equipararlos a los actuales conflictos que existen en el mundo».
«Son sucesos que nos escandalizan y conmueven, si bien, al mismo tiempo, se van desvaneciendo en nuestra conciencia cuando nos resultan lejanos. El hecho de vaciar las obras de sus personajes nos lleva a encontrarnos con el escenario de la desolación, del absurdo», ha agregado.
En la Colección del Museo Guggenheim Bilbao están presentes tres obras de José Manuel Ballester pertenecientes a la serie Espacios ocultos: 3 de mayo (2008), Palacio Real (2009) y La balsa de la Medusa (2010). Las obras suponen reinterpretaciones, respectivamente, de Los fusilamientos del 3 de mayo de 1808 (1814) de Francisco de Goya, Las Meninas (1656) de Diego Velázquez y La balsa de la Medusa (1818-19) de Théodore Géricault.