No cabe duda de que una taza de café nos activa, despierta y nos invita a empezar un día repleto de energía. Sin embargo, además de ser un producto indispensable en millones de hogares como bebida, este tiene otros usos que muchas personas desconocen.
Después de preparar el café, la mayoría de personas solemos deshacernos de los residuos. Pero, como muchos otros productos, el uso de sus granos puede ser algo en lo que nunca pensamos. Conocer estos métodos alternativos seguro te hará verlo con otros ojos.
5Ambientador, recoge el polvo
Además de evitar olores desagradables, el café también tiene poder penetrante y aroma agradable, por lo que también se puede utilizar como ambientador. Para ello, coloca el café molido en una tela porosa, y si es necesario, agrega alguna cáscara de fruta o aceite aromático.
Podemos utilizar café húmedo en lugares donde se amontonan cenizas o mucho polvo (como chimeneas). Esparcir los restos de café sobre la ceniza o polvo se dice que ayuda recogerlo más fácil.