¿No te ha sucedido que a mitad de tu rutina de ejercicio sientes una terrible punzada en un costado del abdomen? Ese inoportuno y molesto dolor es conocido como Flato y aunque es temporal y no representa ningún riesgo o enfermedad grave, puede llegar a ser lo bastante doloroso como para que tengas que tomar un descanso y aguardar a que cese.
Causas
Las razones para padecer de flato pueden ser distintas:
- Hay quienes postulan que se debe a la acumulación de gases mientras hablas al hacer ejercicio.
- Otros piensan que se debe a una congestión venosa en la zona del abdomen que suele ocurrir cuando te ejercitas.
- Incluso hay una teoría de que el flato es causado por el roce del estomago inflamado con el diafragma. Pero esta es descartada ya que hay algunas personas que lo han padecido mientras practican natación, lo cual no tiene una explicación pues en este deporte no existe o al menos hay muy poca fuerza ejercía hacia abajo como para que pueda provocar este roce.
Lo que si se tiene seguro es que el flato suele producirse muchas veces al inicio comenzar con alguna rutina de ejercicios o en el momento que cambias el ritmo de estos.
¿Quiénes son más propensos de padecer flato?
El flato es todo un enigma, y no solo porque se desconoce la razón exacta de aquello que lo causa, sino también que hay personas que nunca lo han sufrido mientras que otras lo han hecho siempre y de manera constante.
Sin contar que los más jóvenes tienden a ser más propensos a sufrir de flato al correr, mientras que las personas con mayor edad no tanto.
Se cree también que las personas con mayores curvaturas dorsales y aquellas que mantienen malos hábitos posturales tienden a tener más probabilidades de sufrir flato.
¿Qué debes hacer cuando aparece?
Lo más recomendable es que disminuyas el ritmo de tus ejercicios o incluso detenerte por completo en caso de que sea demasiado fuerte y quedarte así hasta que el dolor se vaya. Es mejor pausar un par de minutos tu ejercicio a que agudices el dolor y tengas que detener todo tu entrenamiento.
Puedes también ejercer un poco de presión con tu mano en el área que te duele, mientras que al mismo tiempo inhalas y exhalas lentamente, el alivio será inmediato. Repite hasta que crear que el flato se haya ido.
¿Cómo evitar el flato?
Las mamás siempre han recomendado no hacer ninguna actividad física a menos que hayas comido unas 2 o 3 horas antes, y esto puede tener cierta base lógica ya que de esta forma dejaras que tu cuerpo procese el alimento y así no te de flato por los gases.
También recomiendan no beber mucha agua mientras te ejercitas, ya que lo ideal es que tomes de a sorbos y bajo ninguna circunstancia ingerir alguna gaseosa o bebida con gas.
Se cree que un buen calentamiento previo al ejercicio es la mejor táctica para que el flato no estropee tu rutina. Ya sea que vasa trotar, correr o cualquier tipo de actividad física, el calentamiento es primordial para así también evitar algún calambre.
Ejercitar la zona del abdomen también puede funcionar para evitar el flato, solo recuerda hacer tus rutinas de abdominales con cuidado para que no te causes una lesión.
¿Flato o gases?
Existe la posibilidad de que no sea exactamente flato lo que te esté causando esas punzadas, posiblemente se trate de algunos gases acumulados en tu cuerpo que están causando presión en tus intestinos, pero no te preocupes que para ellos existen algunos remedio caseros capaces eliminar cualquier rastro y con ellos el dolor:
- El ajo es muy útil para controlar los gases y mejorar el proceso digestivo. Lo más recomendable es que lo comas fresco, ya sea incluyéndolos en tu comida o incluso comiendo un diente entero.
- El té de manzanilla es un relajante perfecto para mejorar tu digestión y puedes tomarlo antes o después de comer.
- El zumo de limón posee propiedades curativas que pueden estabilizar tu organismo para que así digieras mejor los alimentos y absorbas sus nutrientes. De optar por esta alternativa, debes tomar un vaso con zumo de limón antes y después de cada comida, en especial si lo haces en la cena o antes de dormir.
- La infusión de anís también puede servirte, para prepararla solo debes añadir una cucharada de anís en polvo en una taza de agua hervida y deja que repose unos 3 minutos antes de tomarla
- La raíz de jengibre es también muy útil, ya sea que lo ingieras rallado o como té, solo asegúrate de tomarlo antes de comer.
- Puedes también agregar miel y vinagre de manzana a un vaso con agua, esto te ayudará a expulsar todos los gases que tengas acumulados y a evitar a que más a delante vuelvas a retenerlos.
Ya sabes ahora qué hacer cuando el flato se aparezca para interrumpir tus ejercicios.
¿Te ha servido alguno de estos consejos?