En el año 2016, entró en vigencia el novedoso instrumento legal orientado a mejorar la eficiencia energética en las grandes empresas y, a su vez, promover la reducción de los gases de efecto invernadero. El Real Decreto 56/2016 se ha encargado de regular la cantidad de emisiones registradas por los sectores más contaminantes de la economía nacional a través de las conocidas auditorías energéticas.
El Real Decreto 56/2016, de 12 de febrero, es una de las medidas legales de mayor importancia en materia de eficiencia energética que han sido aprobadas en los últimos años. El principal objetivo del decreto se basa en el desarrollo de acciones que garanticen el ahorro de la energía primaria consumida.
Aunado a ello, entre las principales atribuciones del Real Decreto se destaca la optimización del consumo eléctrico en relación a los equipos e instalaciones de las empresas de mayor tamaño. En este sentido, la medida establece que las compañías con un mínimo de 250 empleados se encuentran entre los sujetos obligados a cumplir con el RD 56/2016.
¿Cuáles son las principales medidas contempladas en el RD 56/2016?
Con el objetivo de impulsar la eficiencia energética y el ahorro de valiosos recursos, en el año 2016 fue aprobado el Real Decreto encargado de establecer normativas legales con relación a las auditorías energéticas. Asimismo, la ley ha regulado los sistemas de acreditación para auditores energéticos y proveedores de servicios energéticos.
En este sentido, la contratación de una empresa de auditoría y gestión energética se ha convertido en una de las principales tareas que deben llevar a cabo las grandes empresas. En este sentido, el Real Decreto establece las siguientes condiciones que permiten determinar qué empresas están obligadas a realizar una auditoría energética:
- Las empresas que cuenten con un mínimo de 250 empleados deberán ser sometidas a los efectos del Real Decreto 56/2016.
- Las empresas que registren un volumen de negocio mayor a 50 millones de euros, y un balance general mayor a 43 millones de euros, califican para la aplicación del decreto de eficiencia energética.
- Los grupos y sociedades que se adecúen a las condiciones de una gran empresa serán incluidas en el ámbito de aplicación del decreto.
¿Qué ocurre con las pequeñas y medianas empresas?
Las microempresas y PYMEs se rigen según con lo establecido en el Real Decreto del RD 56/2016, de 12 de febrero, y siguiendo la Recomendación 2003/361/CE de la Comisión de 6 de mayo de 2003. Este sector de la economía conformado por pequeñas y medianas empresas queda excluido de las medidas eficiencia energética establecidas por la ley, así como de la obligatoriedad de las auditorias energéticas.
¿Cuál es el objetivo de las auditorías energéticas?
El principal objetivo que persiguen las auditorías energéticas es comprobar la adecuación de las grandes empresas a las medidas de eficiencia y consumo energético establecidas en el Real Decreto. A través de la auditoría, es posible conocer con exactitud los avances alcanzados y los niveles de reducción de los gases de efecto invernadero.
Los sectores que hemos delimitado más arriba deben llevar a cabo las auditorías energéticas en periodos de cada 4 años, que inician desde la fecha de la última auditoría. Un proceso de evaluación que debe abarcar un mínimo del 85% del consumo energético de los edificios e instalaciones dentro del territorio nacional.
¿Qué requisitos debe cumplir un auditor acreditado, según el RD 56/2016?
En todo el país, una serie de empresas se han especializado en el sector de soluciones de eficiencia energética y ejecución de evaluaciones oficiales del RD56/2016. Para ello, estos equipos de trabajo se han visto en la obligación de cumplir con una serie de requisitos que les han permitido obtener la acreditación correspondiente.
Entre los principales requisitos solicitados por el sistema de acreditación de auditores energéticos se encuentran los principales puntos:
- Contar documentos identificativos y la cualificación técnica.
- Tener un seguro de responsabilidad civil.
- Adecuarse a los requisitos de la empresa instaladora, en el caso de prestar este tipo de servicios.
Estos son algunos de los principales requisitos que las empresas deben cumplir para calificar como proveedores de servicios energéticos y auditores energéticos.
Como podemos ver, las auditorias energéticas son una medida legal y obligatoria de gran importancia que las grandes empresas deben llevar a cabo. Es una eficaz estrategia que le permite al país controlar la cantidad de contaminación y emisión de CO2.