Las relaciones amorosas de los futbolistas suelen estar a la vista de todos gracias a la prensa que siempre está pendiente de ellos. Si bien en el pasado, la fama hizo que muchos cambiaran de parejas de forma constante; lo cierto es que con el correr del tiempo, estos parecen estar más comprometidos con hallar a su media naranja y además comprendieron que la estabilidad es lo mejor para sus carreras. Cierto que es una consecuencia menor de todas las cosas buenas que tiene mantener buenas relaciones amorosas, pero a ellos les favorece mucho en su fútbol. Ejemplos perfectos se pueden encontrar como Ángel Di María con Jorgelina Cardoso y el Lionel Messi con Antonella Roccuzzo; pero también se pueden encontrar casos a la inversa y el más mediático ha sido el de Jesé Rodríguez que justo ahora se le ha involucrado en una infidelidad con Rocío Amar.
El jugador canario no ha encontrado la estabilidad futbolística necesaria para destacar con su gran talento desde que saliera del Real Madrid y aunque obviamente no todo tiene que ver con su falta de equilibrio en sus relaciones amorosas, si que ha sido un elemento que lo ha distraído mucho. Si bien ahora parecía que se estaba encaminando tras volver con su antigua expareja, la sexy Aurah Ruiz, las cosas duraron menos de lo que se esperaba; porque salió a la luz que ya la habría sido infiel con la exconcursante del programa ‘Mujeres y Hombres y Viceversa’ (MYHYV).
4Todo en bikini es mejor
Aunque un principio todos creyeron la historia de Aurah Ruiz, poco tardó Rocío Amar en contestar. La exparticipante de MYHYV comentó que para que fuera infidelidad «primero había que estar en una relación y que por armar escándalos así es que Jesé no la soportaba y había terminado con ella justó antes de verse con ella. Sea como sea, lo insultos fueron tales que Amar indicó que demandaría a Ruiz por todo lo que dijo. No obstante, la historia parece algo confusa; pero algunos podrían llegar a entender al jugador del PSG, porque si llegaran a tener a un mujerón así como en esta foto con su bikini naranja, pocos podrían resistirse.
