Diego Armando Maradona, mejor conocido por todos en el mundo del balompié simplemente como Maradona, el tal vez mejor jugador en toda la historia del fútbol, terminó siendo uno de los deportistas más emblemáticos, polémicos y ganadores que se ha podido ver en la existencia de Argentina.
‘El Pibe de Oro’ fue reconocido por diversos especialistas en la materia, ex futbolistas, amantes de esta disciplina y diferentes periodistas internacionales como el mejor jugador en toda la historia gracias a los mágicos goles e increíbles acciones que realizó dentro del campo en sus veintiún años de carrera profesional.
Diego Armando Maradona militó en diversos equipos, con los que consiguió la gloria eterna, tales como: Argentinos Juniors (1976-81), Boca Juniors (1981-82), FC Barcelona (1982-84), Napoli (1984-92), Sevilla (1992-93), Newell’s Old Boys (1993-94) y por segunda vez con los Xeneizes (1995-97), último conjunto en el que jugó para después retirarse.
Luego de analizar minuciosamente la carrera del ‘Pelusa’, quien terminó siendo considerado como el hombre más influyente del deporte rey, el diario Qué! decidió llevar a cabo una breve lista con los momentos más majestuosos que él ha podido protagonizar en la cancha.
5Diego Armando Maradona y su mágico gol ante el Real Madrid
Diego Armando Maradona, uno de los mejores jugadores en toda la historia del fútbol, militó en las filas del FC Barcelona desde el año de 1982 hasta el 1984 y terminó siendo protagonista de uno de los tantos más interesantes de los blaugranas hacia el Real Madrid, su rival más acérrimo.
El hecho sucedió en el mítico Estadio Santiago Bernabeu el 26 de junio de 1983 ante ‘La Casa Blanca’, cuando los catalanes jugaban la final de la Copa de la Liga y en donde el argentino pasó a los libros de historia del plantel del Camp Nou.
En la segunda parte, Diego Armando Maradona, durante un contraataque, recibió la pelota y se fue a toda velocidad hacia el arco custodiado por el portero Agustín Rodríguez, a quien encaró y dejó tendido en el suelo para después esperar al defensa Juan José, hacerlo quedar en ridículo y marcar el tan memorable gol.
