Parecía que iba a ser eterno en la tierra, pero ahora lo será en el corazón de sus fanáticos. D10S ha muerto. Maradona ha fallecido de un paro cardiaco a los 60 años. El Diego nos ha dejado algunos de los mejores momentos en el ámbito deportivo y algunos no tan buenos fuera del campo. “El Diego” era un ídolo de masas. Lo de su religión en Argentina es un hecho. La Iglesia Maradoniana ha perdido a su mesías, ahora se ha convertido en un santo.
Fue Campeón del Mundo en el año 86, jugó en el Barcelona. Llegó a Nápoles en donde conoció las mieles del éxito y también se codeó con lo peor. Marcó el gol del siglo XX e intentó resurgir en el Sevilla, pero ya era tarde para él. Se retiró en el equipo de su corazón, en Boca. Desde el palco de la Bombonera disfrutó de los grandes momentos del club Xeneize. Maradona ya es historia del fútbol. La Mano de Dios ya descansa en paz.
3Napoli, la UEFA y el Mundial
En julio del 84 llegaba a San Paolo, el campo del Nápoles. Un club sin aspiraciones que había estado a punto de descender el año anterior. En 1 año Maradona quedó 3º mejor goleador de la Liga y el club decidió que podría pelear por más.
El año 86 fue el de la consagración como estrella mundial del 10. En México Maradona marcó los dos goles más recordado de la historia de los Mundiales. Fue el 22 de junio del 86 en el Estadio Azteca. La Mano de Dios anotando con la mano y El Gol Del Siglo, regateando a 6 jugadores y al portero antes de marcar.
Con el Mundial bajo el brazo, volvió a Nápoles. Aquí terminó de consagrarse. Con este club italiano consiguió dos scudettos, una Copa de Italia y un campeonato de la UEFA. Todo un logro para un equipo que años antes había estado a punto del descenso.