Lo que le faltaba al mejor amigo del hombre es la capacidad de detectar enfermedades. Pues esto es una realidad tan tangible que de hecho se está incentivando con entrenamientos y estudios en el que los perros utilizan su prodigioso olfato. Éste sentido en los perros se utiliza ya desde hace muchos años en unidades como la policía para la resolución de crímenes o incluso la detección de explosivos. Por estos motivos, vamos a ver enfermedades que te puede detectar tu perro y no le estás prestando atención.
Ya desde hace tiempo, se utiliza el olfato de los perros en los campos en los que se vislumbra que pueden ayudarnos, como es el caso de usar su olfato para detectar enfermedades más fuertes como el cáncer o una subida de azúcar entre muchas otras. En algunos problemas de salud más básicos como un desmayo nuestro perro puede percibirlo de forma que se tumba a nuestro lado hasta que volvemos en nosotros mismos, pero en diagnósticos más complicados los perros reciben un buen entrenamiento de forma que no den lugar a discusión o fallo alguno.
Veamos cuáles son las enfermedades que pueden ayudar a detectar nuestros perros.
3Bajadas de azúcar y diabetes
Otros estudios afirman que nuestras mascotas son capaces de detectar que va a producirse una bajada de azúcar en sangre. Un estudio afirmó que lo que nuestras mascotas detectan es una sustancia que expulsa nuestro organismo cuando los niveles de azúcar comienzan a moverse, el isopreno. Los perros y gatos son capaces de detectar mediante el olfato cuando el nivel de expulsión de esta sustancia es bajo y también cuando sube.
A raíz de estas experiencias de dueños diabéticos cuyos perros y gatos les han salvado la vida antes de sufrir un subida de azúcar que les habría matado, se ha comenzado a prestar atención a la capacidad de detección de este mal por parte de nuestras mascotas. Principalmente los gatos, aunque también los perros, suelen percibir los cambios que produce un ataque de hipoglucemia en el organismo a través de su olfato antes de que ocurra, y se ponen nerviosos, ladran o incluso comienzan a lamer a sus dueños como si quisieran alertarlos.