Álvaro Vargas, ex concursante de GH 14, tiene el honor de protagonizar la entrada más accidentada de un concursante a la casa de toda la historia de Gran Hermano. Este graduado en Periodismo y Comunicación Audiovisual dejó aparcada esa profesión para dedicarse a lo que más le gusta, la nutrición. En la actualidad, es uno de los influencers expertos en nutrición con más seguidores.
La experiencia de pasar por la casa de Guadalix de la Sierra cambia la vida a prácticamente todos los concursantes de Gran Hermano y Álvaro Vargas no iba a ser la excepción. Aunque se ha mantenido apartado de la televisión, el madrileño no ha parado de desarrollarse profesionalmente. A continuación, te vamos a descubrir qué fue del «pollito volador» de GH 14.
1SU ACCIDENTADA ENTRADA EN GRAN HERMANO
En febrero del 2013 daba comienzo la décimo cuarta edición de Gran Hermano. Para sorprender a los espectadores, los concursantes tenían que realizar una entrada espectacular en la casa. En una de esas intervenciones, Álvaro Vargas debía haberse lanzado en tirolina, pero el concursante no la vio y, nervioso por la situación, se lanzó al vacío animado por sus compañeros sin ninguna sujeción.
La caída fue estrepitosa y le provocó la ruptura de los dos húmeros. En consecuencia, tuvo que ser trasladado al hospital y no pudo entrar a la casa a concursar. Mercedes Milá le puso como mote «pollito volador» debido a la caída que tuvo y a su llamativo color de pelo.
Cuando se recuperó de las lesiones, pasados unos meses, entró a ocupar su plaza de concursante en la recta final de GH 14 y pasó 50 días en la casa de Guadalix. El madrileño estuvo poco tiempo concursando pero consiguió quedar en el quinto lugar, quedándose a las puertas de participar en la final del concurso.